Ante el evidente involucramiento de aproximadamente 26 mercenarios colombianos que, junto a estadounidenses, participaron en el magnicidio del presidente de Haití, Jovenel Moïse; no solo las autoridades colombianas han tratado de marcar distancia o evadir la responsabilidad de paramilitares entrenados para matar a cambio de fines políticos; sino también los mismos medios de comunicación de ese país se alinean para exculparles y desacreditar los informes de la inteligencia haitiana.
Lo relevante del caso es que los medios de comunicación contradicen los informes oficiales emitidos por las autoridades del país caribeño.
Cierta prensa asegura que los militares retirados colombianos no serían los responsables del crimen del mandatario, ocurrido en la madrugada del pasado 7 de julio. Por el contrario, «ellos habrían viajado con un contrato firmado para prestarle seguridad al amenazado presidente; que sabía y había denunciado públicamente que lo querían matar». Para justificar tal hecho, Revista Semana, por ejemplo, se basa en una supuesta nueva hipótesis sobre el caso, establecida meramente en lo que se dice en algunos medios de comunicación en Haití.
¿Ahora son héroes?
Esta nueva hipótesis de la que hablan, no solo pretende exculpar a los mercenarios colombianos, sino que además los presume como héroes que buscaban salvar la vida del mandatario asesinado.
En este sentido, esta prensa afirma, sin ninguna prueba real hasta ahora, que estos sujetos entraron a la residencia del mandatario tras el suceso y aparte, ayudaron a la primera dama.
Esta «hipótesis» no solo deja en evidencia la baja franqueza y objetividad a la hora de informar sobre un hecho no confirmado; sino que deja de ser creíble. Esto si se toma en cuenta que organismos de seguridad y justicia colombianos han admitido la participación de militares retirados de ese país en planes golpistas y terroristas. Un ejemplo es la fallida operación Gedeón que trataron de ejecutar en Venezuela en mayo de 2020, queda para el análisis.
Mientras Bogotá renegó de los militares, ahora este artículo de Semana, los califica de «expertos comandos» que cuidaban al presidente haitiano.
Pero cómo es que quienes lo cuidaban se apropiaron hasta de una chequera del Presidente. Además, el servidor de la cámara de vigilancia de la residencia, constató que los autores materiales llevaban chalecos antibalas y teléfonos móviles. Así también 40 mil dólares en efectivo, bolsas, hachas, ropa y alimentos.
Es importante destacar que este suceso se da tras la visita de dos altos funcionarios de Estados Unidos, el jefe de la CIA y el del Comando Sur, al gobierno de Iván Duque. Otro dato es que medios locales colombianos pretenden instalar «otra hipótesis» sobre la participación de militares retirados de su país.
