Un policía del Escuadrón Antidisturbios de Colombia fue captado empuñando lo que parece un cuchillo y volvió a desatar la polémica sobre la actuación de la Fuerza Pública durante las protestas del Paro Nacional.
El escándalo es sin duda un episodio inoportuno para el gobierno de Duque que atiende en estos días la visita de la CIDH.
La escena del policía con un cuchillo fue tomada en el Departamento del Cauca, la región más abrumada por la represión.
La imagen revelaría la determinación de las fuerzas represivas para terminar con una protesta social que tiene a Colombia en cuestionamiento internacional.
Estos son los héroes del gobierno. Policía amenazó con un cuchillo a la primera línea de Candelaria, Valle del Cauca. No hay garantías para la vida en Colombia. pic.twitter.com/sCMmMvlYeh
— Periferia Prensa (@periferiaprensa) June 8, 2021
La escena fue en el Valle del Cauca
De acuerdo a los medios locales, las fotos corresponden a una escena de represión en el corregimiento de Villagorgona, en el municipio Candelaria Valle.
Las imágenes viralizadas en twitter sirvieron para que los usuarios le devuelvan a la policía los mismos adjetivos con los que acusan a los manifestantes.
Las personas acusaron a los policías de “vándalos” y “delincuentes”. Al mismo tiempo reflexionaron sobre cuáles alternativas le quedan a un civil para defenderse de la policía, ya que si no los malogran, los judicializan por desacato a la autoridad.
Las fotos sirvieron al menos para que la policía identificara al efectivo. El director del organismo en Cali, Juan Carlos León Montes informó a través de su cuenta en Twitter que el efectivo “que aparece portando lo que parece un elemento cortopunzante” ya está identificado. Adicionalmente precisó que “se adelanta una investigación para aclarar en el menor tiempo posible la situación”.
De acuerdo al registro de Indepaz, hasta el 31 de mayo al menos 69 colombianos murieron en el contexto de la protesta. También apunta que hay 1.248 denuncias de violencia física y 356 casos de personas desaparecidas. A esta cuenta se añaden 25 víctimas de abuso sexual presuntamente por parte de la fuerza pública.