La Policía Nacional de Haití informó este viernes que logró aprehender a dos ciudadanos colombianos más implicados en el asesinato del presidente Jovenel Moïse, el pasado miércoles en su residencia privada, en Puerto Príncipe.
De modo que sumando estos dos a los 15 capturados en horas precedentes y a los dos estadounidenses, de ascendencia haitiana (James Solages y Joseph Vincent), totalizan 19 hombres aprehendidos. Otros tres colombianos cayeron en enfrentamientos con el Ejército y la propia Policía. Faltan entonces seis, también de nacionalidad colombiana, de los que inicialmente se dieron a la fuga, para completar el comando armado de 28 sujetos. A partir de las últimas revelaciones, se concluye que estos actuaron con recursos y previa planificación.
Entretanto, el comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, Luis Fernando Navarro, declaró que «somos categóricos en afirmar que los ciudadanos colombianos vinculados en estos hechos no pertenecen a las fuerzas militares, ejército nacional. No están en servicio activo».
La corresponsal de teleSUR en República Dominicana, Deisy Toussaint, informó que 4 de los exmilitares llegaron a Haití desde Punta Cana, por la frontera El Carrizal. El pueblo haitiano desempeñó un papel clave en la localización de los implicados en el hecho criminal del pasado 7 de julio en la madrugada contra Moïse.
4 de los exmilitares colombianos relacionados con el asesinado del Pdte. haitiano, llegaron a #RepúblicaDominicana desde #Colombia por aeropuerto #PuntaCana el #4Jun a las 2:25pm, hicieron turismo y el #6Jun salieron por la frontera El Carrizal #EliasPiña hacia Haití @teleSURtv pic.twitter.com/bNxsXdacUU
— Deisy Toussaint (@deisy_telesur) July 9, 2021
Colombia involucrada hasta la médula
No obstante, cuatro empresas estarían vinculadas al reclutamiento de estos militares en situación de retiro del Ejército. Así lo admitió este mismo viernes el director general de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas Valencia.
En un vehículo usado por los autores materiales, fueron halladas armas de fuego y una chequera del Presidente. Además, el servidor de la cámara de vigilancia de la residencia, chalecos antibalas, teléfonos móviles, 40 mil dólares en efectivo, bolsas, hachas, ropa y alimentos.
Resulta curioso que a priori ciertos sectores difundieron sin pruebas la hipótesis, comprobadamente falsa ya, de la participación de venezolanos en el magnicidio. Al final se trataba de colombianos y estadounidenses, como se dijo. Además, el asesinato ocurrió a pocos días de la visita de dos altos funcionarios de Estados Unidos, el jefe de la CIA y el del Comando Sur, al gobierno de Iván Duque. Otro dato es que medios locales colombianos pretenden instalar «otra hipótesis» sobre la participación de militares retirados de su país.
El asesinato de Moïse agrava la crisis de gobernabilidad que ya atravesaba el país, en medio de una creciente inseguridad.