Luego de los efectos adversos que ha tenido la vacuna de AstraZeneca, Francia tomó la decisión de inyectar una segunda dosis de las vacunas de Pfizer o Moderna a los pacientes menores de 55 años; quienes ya han recibido una primera dosis del antídoto británico.
El ministro de Salud de Francia, Olivier Véran, declaró este viernes en una radio de ese país que esa será la solución que adoptará la Alta Autoridad sanitaria para inyectar la segunda dosis de las 500 mil personas; en su mayor parte personal de salud, de esa franja de edad vacunados con una primera dosis de AstraZeneca.
Por su parte, el jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas de un hospital parisino, Jean-Daniel Lelièvre dijo que «una sola dosis no es suficiente para garantizar la inmunidad a largo plazo contra el covid (…). Hemos decidido utilizar una de las vacunas de ARN», es decir, las de Pfizer y Moderna, señaló.
Lo que dijo la OMS
Luego de los anuncios franceses, la portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), informó que esta cuestión está en estudio, conforme a la sugerencia que hizo el grupo de expertos que asesora a la OMS en el terreno de la inmunización.
«No hay datos adecuados como para decir que esto es algo que se puede hacer. Así que en estos momentos no podemos recomendar la combinación de vacunas«, comentó el portavoz.
Desde trombosis hasta hemorragias, han sido los efectos de las AstraZeneca en pacientes de varios países por lo que más de 16 naciones han decidido prohibir la inmunización con este antiviral. Incluso el gobierno venezolano prefiere no hacer de su uso en resguardo de la salud de la población.
De hecho, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), señaló la posible formación de coágulos de sangre figura como un efecto secundario «muy raro» de la vacuna de AstraZeneca contra la covid-19.
