La administración de Donald Trump continúa su persecución contra Venezuela y sus autoridades legítimas y constitucionales. Mediante un comunicado, la Casa Blanca anunció nuevas «sanciones» contra Nicolás Maduro, esta vez por sus relaciones con Irán.
Sin embargo, aunque para la nación suramericana las agresiones de los Estados Unidos se han convertido en algo habitual; es la primera vez que el gobierno norteamericano dicta sanciones por su acercamiento con la nación islámica.
El argumento
En ese sentido, bajo el trillado argumento del programa armamentístico iraní; dirige estas nuevas agresiones en contra de Venezuela e Irán. En el caso del país islámico, el ataque fue dirigido contra su ministerio de Defensa y otros funcionacios del gobierno del presidente, Hassan Rouhani.
«EE.UU. no permitirá que el régimen iraní avance más en sus acciones para amenazar y aterrorizar al resto del mundo. Mi administración utilizará todas las herramientas a nuestra disposición para detener la estrategia de Irán para dotarse de armas nucleares, misiles balísticos y armas convencionales» reza el comunicado de la Casa Blanca.
Por otro lado, a Venezuela se le acusa de «haber participado o intentado participar en actividades que contribuyen materialmente al suministro, venta o transferencia directa o indirecta hacia o desde Irán, o para el uso en Irán o en beneficio de Irán, de armas o material relacionado, incluidas piezas de repuesto», esgrime el escrito.
La finalidad
A consecuencia, estás nuevas medidas coercitivas unilaterales congelan las propiedades y los bienes que los «amonestados» tengan en la nación norteamericana. Es decir, el gobierno de los Estados Unidos continúa el robo de los bienes y recursos financieros de Venezuela e Irán a través de sanciones.
Hasta la fecha, la aplicación de estas medidas ha significado el robo de más 30 mil millones de dólares en activos de la República Bolivariana de Venezuela; robo que no han detenido, ni siquiera en el contexto de pandemia.
Ilegal y predecible
En torno a esto, a través de su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov; Rusia manifestó que según la resolución 2231 del Consejo de Naciones Unidas; Estados Unidos no puede introducir sanciones contra Irán. Asimismo, agregó que cualquier paso para restaurar las medidas punitivas puede ser iniciado solo por un miembro del acuerdo nuclear iraní, del que la Casa Blanca en 2018.
Finalmente, sobre una posible respuesta sancionadora de EE.UU., Lavrov declaró: «No me sorprendería si continúa amenazando con sanciones a todos los que cooperan con Irán; porque aplica sanciones en todo el mundo y, a veces, sin ningún motivo«, sentenció.
