Con una denuncia ante la Corte Penal Internacional (CPI), una ONG de Austria acusó al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, por incurrir en crímenes contra la humanidad, con la destrucción de unos 4 mil kilómetros cuadrados en la selva amazónica, considerada el pulmón vegetal más grande del planeta.
Se trata de la Organización No Gubernamental All Rise, la cual declaró en el documento que las acciones del mandatario brasileño representan un «ataque generalizado contra la Amazonía, contra quienes dependen de la selva y también contra quienes la defienden».
«El objetivo de nuestra denuncia penal ante La Haya en Holanda, es demostrar que podemos hacer algo por el medio ambiente; desde el derecho penal internacional; también queremos apoyar las denuncias presentadas directamente desde Brasil», expresó Wolfram Proksch, cofundador de All Rise.
Por su parte, el activista fundador de la organización, Johannes Wesemann, aseveró que «como el bioma amazónico es el pulmón de nuestro planeta, su destrucción nos afecta a todos». Con esto, ilustra por qué la política y los proyectos que promueve el gobierno de Bolsonaro son la causa del impacto negativo sobre el cambio climático.
El representante legal de la ONG que denunció a Bolsonaro expresa que están conscientes de que entran en un nuevo terreno legal con el procedimiento; y afirman que la demanda tiene un carácter no solamente simbólico, sino que debe sentar un precedente. «Hay muchos más Bolsonaros ahí afuera y no nos queda mucho tiempo para detener el cambio climático y salvar este planeta», dijo Proksch.
Peligro de muerte
La deforestación y destrucción generalizada que impulsa Bolsonaro en la selva amazónica, provocará la muerte de 180 mil muertes más en el presente siglo, como resultado del incremento en la temperatura del planeta.
Asimismo, los demandantes presentaron un informe de 300 páginas; el cual contiene datos y registros que demuestran cómo la destrucción de la Amazonía causa 20% de las emisiones de carbono a nivel global. Esa cifra es 1.5 veces mayor que la contaminación que generan juntos el transporte aéreo, por vehicular, ferroviario y acuático.
Por estas razones, los voceros de la ONG aseguran que es evidente comisión de crímenes contra la humanidad por parte del gobierno de Brasil. En ese sentido, urge la apertura de una investigación que conduzca al enjuiciamiento de los responsables; entre quienes señalan como principal factor al mandatario Jair Bolsonaro.
«Sólo si todos nos unimos y ll
evamos a los responsables como el presidente Bolsonaro ante la justicia, podremos asegurar nuestro planeta para las próximas generaciones. Hay que perseguir a los poderosos que destruyen intencionadamente el medio ambiente», añadió Johannes Wesemann, de la organización All Rise.
