Sobre los criminales prófugos de la justicia, que huyeron hacia Colombia, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, reveló los motivos que llevan a esos delincuentes a decidir ese destino para evadir su responsabilidad ante la ley.
En un encuentro con la comisión electoral del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), a pocos días para las elecciones primarias internas; el mandatario abordó el tema de la lucha contra bandas y grupos paramilitares, a lo que se suman nuevas propuesta de legislación nacional.
«Se están yendo para Colombia los delincuentes porque allá los reciben con los brazos abiertos los grupos paramilitares y delincuenciales que dirige Álvaro Uribe Vélez y el señor Iván Duque«.
Asimismo, felicitó al Parlamento por la aprobación, en primera discusión, de la Ley de cuadrantes de paz. Todo esto con el objetivo de consolidar la paz y la estabilidad es todas las comunidades del país.
Dijo que estos instrumentos son útiles «para ir liberando la Patria de bandas delincuenciales. Así como liberamos la Cota 905 y toda la zona sur de Caracas de bandas delincuenciales financiadas desde Colombia, armadas por el paramilitarismo de Iván Duque, en Colombia», agregó Maduro.
Por otra parte destacó la labor del Poder Legislativo, en atención las necesidades y propuesta del Poder Popular; con lo cual se han establecido otras leyes innovadoras como las de Ciudades Comunales y del Parlamento Comunal.
El anuncio de la policía colombiana
Los comentarios del presidente Nicolás Maduro se produjeron horas después de que circulara un video en el cual la Policía de Colombia afirma que se mantienen el alerta; ante la posible presencia en Cúcuta de los delincuentes alias Koki, alias Vampi y alias Garbys. Estos prófugos fueron expulsados de la Cota 905 tras la operación de liberación de los cuerpos de seguridad de Venezuela.
De parte del Gobierno venezolano no se ha habido pronunciamiento en torno al hecho. En territorio venezolano las autoridades mantienen la búsqueda, detención y neutralización de los denominados «líderes negativos» que mantenían azotada la populosa zona de la ciudad de Caracas.
Las investigaciones determinaron que en la Cota 905, las bandas delincuenciales estaban asesoradas y entrenadas por el menos 20 paramilitares colombianos. Además, se comprobó la vinculación de sectores políticos y militares de Colombia; en el suministro de armas a esos grupos, en complicidad con representantes de la ultraderecha nacional.