El último reporte de Organización Mundial de la Salud (OMS) resulta revelador para quienes aún dudan de los datos facilitados por el gobierno de Venezuela, de la efectividad de las medidas tomadas hasta ahora y para quienes esperan tristemente que se disparen los números de contagios y fallecidos para sacar réditos políticos.
Datos importantes de Venezuela:
1. Es el país con el mayor número de pacientes recuperados.
2. Ha practicado la mayor cantidad de pruebas diagnósticas en la región.
3. El número de casos positivos es muy bajo en relación a densidad poblacional, lo que indica un aplanamiento en la curva de contagios.
Estos datos tumban los argumentos de oposición venezolana que insiste en aprovechar el momento para chantajear en torno a la “necesidad” de la salida por la fuerza de Nicolás Maduro para superar esta nueva crisis, agravada por las medidas coercitivas impulsadas por ellos mismos.
Los números no solo legitiman el liderazgo de un gobierno que llega a 25 días de cuarentena, sino que muestra la impresionante proeza de qué significa garantizar el control político, institucional y el bienestar de las mayorías en medio de un bloqueo y un asedio permanente.
OMS: nuevo objetivo de EE.UU.
Los recientes ataques del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la OMS y sus señalamientos de parcialidad e inoperancia de la misma, han dejado boquiabiertos a los expertos en el área de salud que día a día batallan contra el virus.
Pues si algo no se puede ocultar en una tragedia como esta son los datos, porque se trata de vidas y detrás de cada persona infectada o fallecida hay afectos, dolores y angustias que difícilmente puedan alinearse a los intereses de un gobierno o una organización.
En ese sentido, la razón de los ataques viene dada por el empeño de la organización en mostrar una verdad inocultable que deja al descubierto la ineficiencia y la indolencia de los gobierno neoliberales que, entre otras cosas, pone en la cuerda floja la posición de “liderazgo mundial” de EE.UU. y la continuidad del sistema capitalista vigente.
