La Casa Blanca cumplió sus amenazas a pocas horas de vencerse la Licencia 44, otorgada en octubre de 2023 para permitir las operaciones de petróleo y gas con Venezuela. La imposición de la Licencia 44A llega en pleno desarrollo del cronograma electoral venezolano que ha dejado en evidencia las disputas de la oposición, y en medio del reimpulso de la economía del país.
¿Que implica la anulación de la Licencia 44?
El documento emitido por el Departamento del Tesoro sentencia que todas las actividades que se estaban desarrollando bajo la licencia 44 deben cerrarse en los próximos 45 días.
En este sentido, las concesiones otorgadas anteriormente se derogan y se sustituyen por la Licencia 44A, la cual establece que las empresas deberán solicitar permisos específicos para incorporarse en el sector del petróleo y el gas de Venezuela. Esta jugada deja a discrecionalidad de Washington la posibilidad de detener las operaciones cuando considere que la seguridad nacional y los intereses de su política exterior estén amenazados.
Aunque la narrativa estadounidense insiste en la “re imposición” de sanciones, todo apunta a la incorporación de trabas burocráticas que implicarían altos costos administrativos para las empresas que operen con Venezuela.
La licencia 44A supone, además de un elemento de presión, un tipo de multa a los inversionistas europeos y asiáticos, que busca privilegiar a las empresas estadounidenses y socavar el aparato productivo venezolano. Ratificando que la imposición de aranceles, trabas y cuotas de importaciones son las principales armas de las guerras comerciales, cuyo objetivo es conducir o agravar la crisis económica.
En este punto vale la pena preguntarse ¿Cuál es la posición de la Organización Mundial para el Comercio (OMC) sobre este asunto?
Posición firme
El Gobierno venezolano ha mantenido una posición firme, desmintiendo categóricamente el discurso de «re imposición» de sanciones, afirmando que las licencias otorgadas hasta el momento no representan un levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales. Al mismo tiempo, que el crecimiento sostenido en los últimos 3 años habla sobre las capacidades instaladas en Venezuela para resistir y superar los embates del bloqueo económico.
Nicolás Maduro: No hay sanción, no hay amenaza que hoy por hoy le haga daño al esfuerzo por construir un modelo económico productivo (…) Solo dependemos de nuestro esfuerzo, de nuestros planes y de nuestra sabiduría. Más bien nos da más impulso.
