10 días después de haber sido vacunada contra la covid-19, una mujer de 57 años está en coma inducido en un hospital del País Vasco.
La paciente se habría inyectado el fármaco de AstraZeneca, y según los que siguen el caso, su estado pudiera estar probablemente asociado con el pinchazo.
La red de fármacovigilancia de la provincia autónoma habría notificado que el evento parece “un acontecimiento adverso grave asociado a la vacunación”.
De acuerdo a los reportes de medios europeos que reseñan este caso, la mujer presenta “patologías previas” que siempre son una condición a tener en cuenta antes de la vacunación contra la pandemia.
La señora está internada en la UCI del Hospital Santiago de Vitoria. Ésta según empezó a sentirse mal una vez que recibió la dosis de AstraZeneca “y se desplomó”.
De confirmarse que el repentino deterioro de su salud corresponde a la aplicación de la vacuna, sería el primer caso oficial de este tipo en El País Vasco.
Pinchados de desconfianza
El antídoto de la farmacéutica anglo-sueca atraviesa una grave crisis de fiabilidad sobre su biológico. Si bien los casos adversos son reducidos respecto a los millones de personas vacunadas con esta dosis, ya muchos países han preferido suspender su uso.
El efecto adverso más repetido después de la inyección sería la de la formación peligrosa de coágulos en la sangre que incluso ya ha producido la muerte de varios pacientes.
A pesar de estos casos, la OMS sigue considerando que el biológico de AstraZeneca es seguro. Consideran que los beneficios siguen siendo superiores respecto a las amenazas.
Adicionalmente a estas dificultades, la empresa ahora enfrenta una demanda de la Unión Europea por incumpliendo en los despachos de vacunas acordados.