A pesar de las muchas cosas graves que pasan en Colombia, sus autoridades sólo parecen estar enfocadas en el tema de la migración venezolana a ese país.
El gobierno neogranadino resalta que sus capacidades para atender el flujo de personas que entran al país están desbordadas.
Por esta razón, la canciller colombiana, Claudia Blum, clamó por el auxilio de otros países, así como de organismos internacionales para atajar esta situación.
“Colombia necesitará la cooperación de otros países y de organizaciones internacionales. Nuestras capacidades están desbordadas; y la cooperación internacional es importante”, dijo Blum durante una videoconferencia con medios y organizaciones alemanas para explicar en qué consiste el denominado Estatuto Temporal de Protección para Migrantes Venezolanos.
La jefa de la diplomacia despejó las dudas de cómo se debería expresar esa “ayuda” remarcando la recia tradición colombiana de pedir dinero.
Blum mencionó que esperaba una “respuesta positiva” en la próxima conferencia de donantes que se celebrará el 17 de junio en Canadá; una fecha bastante lejana para el problema de la migración venezolana, que se supone es urgente para las autoridades colombianas.
Sobre el estatuto aprobado por Colombia, el gobierno venezolano lo despachó como una payasada. El presidente Maduro añadió que con ésta Iván Duque buscaría lavarse la cara después que dijo que no vacunarían contra la covid a los migrantes.
Al mismo tiempo Caracas considera que la política migratoria colombiana con los venezolanos es una operación interesada y de propaganda.
Adicionalmente el gobierno venezolano acusó a Iván Duque de hacer de este tema un negocio, convirtiendo a Bogotá en el epicentro de una enorme operación de “martilleo”.
