¿Altruismo o barbarie? El rostro oculto de Bill Gates

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Bill Gates, co-fundador de Microsoft, es conocido como un magnate mundial y presentado por la industria mediática capitalista, como modelo ejemplar del hombre triunfador que llega a la cima a través de su propio esfuerzo, un filántropo que dona a buenas causas el dinero que ha logrado obtener. Se presenta a la luz pública ante la pandemia mundial, como una especie de semi dios o super héroe, que supera los obstáculos para salvar a la humanidad. Según la revista Forbes, el magnate se posiciona, en 2020, como el segundo hombre más rico del mundo, con una fortuna de 94 mil 700 millones de dólares.


La secta llamada Club de Bilderberg

Bill Gates es invitado a las reuniones del Club de Bilderberg, desde el año 2010. Este es un grupo selecto donde se incluyen unos 130 personajes de las élites política, económicas y religiosas que mueven en silencio los hilos del poder mundial. Fue creado en 1954 y tuvo como propósito “hacer un nudo alrededor de una línea política común entre Estados Unidos y Europa en oposición a Rusia y al comunismo” y, si fuera posible “controlar la economía mundial entre los miembros del Club”.

¿A donde se dirigen las donaciones del magnate? 

El carácter filantrópico de Bill Gates, se esconde tras donaciones millonarias a la Fundación Bill y Melinda Gates, exenta de pago de impuestos y perteneciente a su esposa. Según su cara pública, esta fundación se creó para “hacer frente a las enfermedades, resolver la escasez de alimentos en África y aliviar la pobreza”. Sin embargo, los hechos colocan en entredicho estos postulados.

¿Qué se esconde detrás de esta fachada?

  • Marzo de 2005: se realizan pruebas clínicas en Nigeria de un antiviral contra el SIDA llamado Tenofovir, las cuales se suspendieron debido a grandes faltas éticas. Estos experimentos eran financiados por el gobierno de Estados Unidos y por la fundación Bill y Melinda Gates. Estas pruebas se suspendieron también en Camboya (2004) y Camerún (2005); pero continúan en Tailandia, Botswana, Malawi, Ghana y Estados Unidos.
  • Ted 2010: En el año 2010, Bill Gates participa en los premios TED, evento creado en 2005 donde se invitan personas específicas (en general magnates), con la finalidad de formular “un deseo para cambiar el mundo”. El deseo de Gates en esa oportunidad, fue la reducción de la población mundial a través de una vía bastante curiosa: las vacunas.

  • TED 2015: en este año, Gates participa nuevamente del evento donde se expresan los sueños para el mundo. Por primera vez  se refiere a la posibilidad de que el mundo afronte una pandemia con gran “poder de contagio”, parecida a la gripe española, que pudiera mantener a las personas infectadas en buen estado mientras visitaban aeropuertos o supermercados. ¿Por qué estas “predicciones” tan precisas?

  • 2018: la Fundación Bill y Melinda Gates crea una biotecnológica. Según ha informado FierceBiotech, revista dedicada a la tecnología: “el Instituto de Investigación Médica de Gates transformará la experiencia y los procesos de la industria farmacéutica en enfermedades intratables que matan a millones de personas anualmente en países de bajos y medios ingresos”. Su plan es “obtener medicamentos, vacunas, anticuerpos y otros activos de la selección de candidatos preclínicos y llevarlos a una prueba clínica de concepto”. Cuenta con una inversión de 100 millones de dólares al año.
  • Octubre 2019: el Centro Johns Hopkins para la Seguridad en la Salud, el Foro Económico Mundial, y la Fundación Bill y Melinda Gates financian el “Evento 201”, realizado en Nueva York. Este evento contó con la participación de 15 “expertos mundiales” en el ámbito empresarial, gubernamental y de salud pública. Tuvo como finalidad simular un escenario de pandemia mundial, muy semejante al que estamos viviendo actualmente; con el objetivo de prepararse y dar soluciones a nivel global.

El excesivo interés demostrado por Bill Gates por entrar en la batalla contra el covid-19 no responde a la suerte de espíritu bonachón y altruista que lo encarna y que se vende como cortina de humo. Lleva años cociendo su fortuna en el inmenso horizonte de las vidas humanas vistas como negocio.

Desde 2015, organiza lobbys políticos y de inversores para “crear un sistema de salud fuerte” en caso de una pandemia, con características casi idénticas al covid-19. Ahora se está en elaboración desde el negocio privado de 7 posibles vacunas con grandes industrias farmacéuticas, mascarillas y pruebas de despistaje. Asimismo, acaba de declarar donaciones millonarias a la OMS. ¿Qué se esconde detrás de la fachada de Bill Gates? ¿Altruismo o barbarie?

 


 

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