Con una visión conjunta que ratifica la voluntad de entendimiento con el nuevo gobierno de Estados Unidos, el rechazo a las sanciones contra países de la región y acciones comunes para combatir la pandemia, se desarrolló la reunión del Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).
En tan sentido, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, dio apretura al evento, en compañía del secretario ejecutivo del ALBA, Sacha Llorenti. También asistieron los representantes gubernamentales de otras naciones que conforman el bloque, entre las cuales destacan Cuba y Bolivia.
Asimismo, con respecto a la nueva administración de la Casa Blanca, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela manifestó que en la nación del norte «hay un nuevo gobierno. Quisiéramos que respete a los países de la Alianza Bolivariana. Que establezca relaciones cooperativas, en el marco de la Carta de Naciones Unidas y respete los asuntos internos de nuestros países».
En esa misma línea ratificó que el ALBA-TCP contempla, en su declaración final, el rechazo al atrevimiento del gobierno estadounidense de poner a Cuba en una lista de facilitadores del terrorismo en el mundo. Igualmente, repudian la aplicación del bloqueo contra la isla caribeña.
Sanciones contra los pueblos
El canciller Arreaza explicó que las medidas coercitivas que impone el gobierno de Estados Unidos contra Cuba y Venezuela, también impactan todos los países caribeños. Estas representan trabas para instituciones como Petrocaribe y tienen consecuencias arbitrarias, crueles e inhumanas sobre el bienestar de dichas naciones.
Por su parte, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, agradeció las muestras de solidaridad y apoyo “tras la infame decisión del gobierno saliente de Donald Trump, de incluir a Cuba en la infame lista de países promotores del terrorismo”.
El diplomático cubano convocó al gobierno de Joe Biden a tener una relación respetuosa con la región, sobre la base de la igualdad soberana, sin injerencia en asuntos internos y con plena observancia de la independencia. «Es hora de que se reviertan de manera total e incondicional las medidas coercitivas que tanto daño causas a nuestros pueblos», dijo.
Declaración final
El secretario ejecutivo del ALBA-TCP, Sacha Llorenti, presentó el documento de 19 puntos, al cierre de la reunión, en el cual ratifica el repudio y la denuncia a las políticas guerreristas del gobierno de Estados Unidos, al hacer caso omiso al «alto al fuego mundial en todos los rincones del mundo», al que llamó la ONU en medio de la pandemia.
Las sanciones de la Casa Blanca y la UE contra Cuba y Nicaragua y Venezuela también recibieron el repudio del mecanismo de integración regional ALBA-TCP. Este ratifica su compromiso con la paz.
«Debemos trabajar unidos sobre la base de la inmunización extensiva contra la covid-19, como bien de salud pública mundial. Se precisa una distribución equitativa y solidaria que permita proteger a los pobres y más vulnerables» expresó Llorenti como otro de los puntos de la Declaración Final.
Por otra parte, denunció el acaparamiento de vacunas por parte de países más poderosos. Insistió en la urgencia de atender las necesidades especiales de los hermanos países del Caribe. Esto les permitiría beneficiarse de la cooperación para enfrentar la pandemia.
También en materia de salud, el ALBA-TCP destacó las iniciativas de la República de Cuba, con sus aportes para la protección de vidas; a través de la labor de la Brigada Médica Henry Reeve, a la cual respalda en la postulación al Premio Nobel de la Paz.
