Provea, Organización No Gubernamental, que se define en su cuenta en Twitter como un «programa venezolano de educación-acción en Derechos Humanos», emitió el pasado 4 de mayo una serie de mensajes en esa misma red social, en los que llama a «proteger derechos humanos» de los mercenarios detenidos recientemente en Venezuela por la acción conjunta de fuerzas civiles y militares del Estado venezolano.
Provea acusa al presidente Maduro de «principal responsable de cualquier hecho de violencia por razones políticas en el país», al tiempo que convoca a aumentar las presiones diplomáticas y las sanciones que han afectado directamente al pueblo venezolano de manera violenta.
Ante el cierre de los canales pacíficos y democráticos para la resolución del conflicto en Venezuela, Nicolás Maduro es el principal responsable de cualquier hecho de violencia por razones políticas en el país
— PROVEA (@_Provea) May 4, 2020
La organización no rechaza las acciones de violencia impulsadas desde EE.UU. y Colombia, que venía a cometer este grupo armado de mercenarios a través de la preparación en campamentos colombianos y el ingreso de armas de guerra que, a partir de las investigaciones y confesiones de Clíver Alcalá y Jordan Gourdeau, tenían como objetivo asesinar al presidente de la República Nicolás Maduro y a otros líderes de la Revolución Bolivariana.
Deben ser respetados los DDHH de las personas detenidas en los últimos hechos. Responsabilizamos a Tarek William Saab y Alfredo Ruiz sobre posibles desapariciones forzadas y actos de tortura contra aprehendidos
— PROVEA (@_Provea) May 4, 2020
Provea al servicio del Departamento de Estado de EE.UU.
El coordinador general de Provea, Rafael Uzcátegui, ha negado que esta organización reciba financiamiento de EE.UU.
“Desde Provea nosotros hemos establecido una política de no recibir financiamiento de los organismos que dependen del Departamento de Estado por el alto costo político que esto tiene, no por razones morales”, dijo.
“Los dos cooperantes históricos de Provea son Misereor, que son cristianos y cuya parte de sus recursos provienen del gobierno alemán y la fundación Open Society Institute que está en los Estados Unidos”, afirmó Uzcátegui.
Precisamente, la fundación Open Society Institute es financiada directamente por la USAID, que recibe financiamiento directo del departamento de Estado de EE.UU. Esto explica la presencia de Provea en los planes conspirativos que desde el imperio estadounidense se han activado sistemáticamente contra Venezuela los últimos 20 años.
Ha sido una constante en Provea defender mercenarios, así como hacer el silencio ante las violaciones de derechos humanos que surgen del bloqueo criminal o de los casos de asesinatos por odio como el caso de Orlando Figuera en las guarimbas de 2017.
