Nayib Bukele busca reelección: ¿Molesta a EE.UU.?

El presidente ultraderechista de El Salvador, Nayib Bukele, provoca más antipatía por parte del gobierno de Estados Unidos, tras la decisión judicial que permite al mandatario centroamericano, optar por la reelección como jefe de Estado de su país.

El pronunciamiento contra Bukele lo formalizó la encargada de negocios de Washington en El Salvador, Jean Manes, quien publicó en Twitter mensajes en rechazo a la medida que aprobaron autoridades salvadoreñas.

De esta forma, la administración de Joe Biden, pone de manifiesto su condena directa al fallo que emitió la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia; que abre las puertas a la reelección inmediata de Nayib Bikele como presidente de la República.

“Es claramente contraria a la Constitución salvadoreña que establece que la reelección inmediata no está permitida”. Así lo dijo la diplomática en uno de sus escritos, con lo que ratificó declaraciones emitidas anteriormente a la prensa.

¿Un amigo antipático?

Pese a ufanarse de su profunda convicción como enemigo de la izquierda regional y mundial, Nayib Bukele también ha resultado ser un “amigo” algo incómodo para el gobierno de Joe Biden. Por ejemplo, Washington le mostró su repudio en mayo pasado, cuando el mandatario destituyó a 5 magistrados nacionales.

Inclusive, por aquellos días la Casa Blanca también decidió retirar el apoyo financiero al gobierno salvadoreño; para lo cual asumió el argumento de los presuntos hechos de corrupción en los que incurrieron integrantes del gabinete de Bukele.

Por ese motivo, la directora de la Agencia Estadounidense para la Cooperación Internacional, Samantha Power; dijo que la administración Biden tenía “preocupaciones mayores en materia de transparencia y rendición de cuentas” por parte del presidente de El Salvador.

Así, la amistad que Bukele profesó en todo momento con el expresidente estadounidense, Donald Trump, no se replicó con la llegada de Biden. Con todo esto, aunque el actual gobierno de EE.UU. no ha roto relaciones con El Salvador, sí han condicionado “las buenas relaciones” entre ambos países a “los límites” que Bukele respete en el ejercicio de su mandato.

 


 

José Manuel Blanco Díaz: