Este primero de mayo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro anunció que rompió las relaciones bilaterales con Israel. “Por tener un Gobierno y un presidente genocida”.
“El mundo podría resumirse en una palabra que reivindica la necesidad de la vida: Gaza. Se llama Palestina, se llama los niños, las niñas y los bebés que han muerto descuartizados por las bombas”, declaró durante el acto por el Día del trabajador en la Plaza de Bolívar, en Bogotá, la capital del país..
Por su parte, la Cancillería colombiana destacó que su país “no ha dejado de insistir en la necesidad de lograr un alto el fuego en Gaza y el respeto al derecho internacional humanitario“. Lamentablemente, hasta ahora todas sus aspiraciones han sido en vano y “lo único que ha recibido” han sido insultos y actos inamistosos contra Colombia y el presidente Petro por parte de las autoridades de Israel.
“Si muere Palestina muere la humanidad y no la vamos a dejar morir como no vamos a dejar morir la humanidad”.
Asimismo, Colombia en la voz del presidente Petro, sigue exigiendo, al igual que muchas naciones y organizaciones internacionales, que Israel “respete el derecho internacional humanitario (DIH) y acate las resoluciones de la ONU, particularmente las emitidas por el Consejo de Seguridad”. No obstante, el gobierno sionista de Israel “no ha respetado los principios de distinción, proporcionalidad y precaución que sustentan el derecho internacional humanitario”.