El exdirector del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, Mark Carney, se convirtió este domingo en el primer ministro de Canadá, en reemplazo de Justin Trudeau, que llevaba más de 8 años en el cargo.
El economista de 59 años, obtuvo el 86% de los votos en una elección en la que participaron unos 152 mil miembros del Partido Liberal.
Durante su discurso de victoria, Carney arremetió contra las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegurando: «Hay alguien que está intentando debilitar nuestra economía. Está atacando a los trabajadores, las familias y las empresas canadienses. Pero nosotros ganaremos esta lucha».
«Esto no será como siempre. Tendremos que hacer cosas que no habíamos imaginado antes, a velocidades que no creíamos posibles», dijo Carney en referencia a la guerra comercial que actualmente enfrenta Canadá.
Asimismo, el nuevo primer ministro, sentenció que: «Canadá nunca será parte de EE.UU., de ninguna manera», luego que el presidente estadounidense asomara la posibilidad de que ese país se convierta en el estado número 51 de Estados Unidos.
Relaciones comerciales
En cuanto a las relaciones comerciales, Mark Carney, comentó que su gobierno pondrá en marcha un plan para construir una economía más fuerte y «nuevas relaciones comerciales con socios comerciales fiables. No podemos dejar que Trump tenga éxito».
«Son días oscuros, provocados por un país en el que ya no podemos confiar. Nosotros no pedimos esta lucha. Pero los canadienses siempre estamos dispuestos a salir adelante», agregó.
Por lo que destacó que: «EE.UU. quiere apoderarse de nuestros recursos, agua, nuestra tierra, nuestro país. Si logran tener éxito, destruirían nuestro modo de vida».
Nuevo capítulo político
Por su parte, Justin Trudeau, expresó su apoyo a Carney, al tiempo que destacó la esperanza que representa para el país y el partido en este nuevo capítulo político.
Entretanto, dijo estar «orgulloso» del trabajo que realizó en los últimos 10 años. «Canadá es un país que luchará cuando sea necesario», destacó.
En otro orden de ideas, Trudeau también aseveró que Canadá es un país de lucha. «La democracia y la libertad no es algo que se da por sentado, ni siquiera Canadá es algo que se da por sentado», agregó.