El venidero domingo 6 de diciembre el chavismo obtendrá en el occidental estado Zulia «la victoria más hermosa en su historia política» y al mismo tiempo el «2021 será el año de la recuperación económica». Así lo pronosticó el joven candidato a la Asamblea Nacional por el circuito 4 de la ciudad de Maracaibo (Zulia), Fidel Madroñero.
«El próximo 5 de enero de 2021 ustedes van a ver este guajirito juramentarse en la Asamblea Nacional. Así lo declaro en nombre de Cristo Jesús. Pero también sé cuál es mi papel, sé que devolveremos a Chávez y Bolívar a la Asamblea Nacional, pero también sé que tiene que haber un despertar y un accionar político», expresó Madroñero este jueves en su acto de cierre de campaña electoral.
Reconoció que «ha sido muy difícil ser candidato porque han intentado por todos los medios que todos los que estamos aquí nos quebremos y traicionemos la Revolución. Guerra económica, consecuencias del bloqueo criminal, pero nosotros también nos hemos equivocado». Admitió que «este Fidel que está aquí no es el mismo de 2015. Yo entendí que con soberbia, con prepotencia no iba a conquistar la voluntad de la gente. Es la humildad lo que la gente aprecia, lo que llega al corazón de los seres humanos. Quiero decirles que mi humildad es sincera, no es una puesta en escena».
Gobernar con y para el pueblo
El joven comunicador cuestionó el bloqueo de Estados Unidos al decir que «los revolucionarios estamos del lado del bien porque quienes bloqueen alimentos y medicinas están del lado mal. Ustedes saben quién le sirve al mal y también quién le sirve al bien». Al mismo tiempo dijo que «aprobar leyes y olvidarse del pueblo que está aquí sería una traición». De modo que se comprometió a permanecer del lado de los más.
«Si me rindo estaría haciendo lo mismo que los últimos diputados que ganaron por este circuito, que eran escuálidos los dos, que no hicieron nada, que no ayudaron a nadie (…) Cuenten conmigo para arrecharse, cuando haya una injusticia, por agua o por luz, cuenten conmigo. Como dice Alí Primera, no voy a perfumar la mierda ni voy a tapar lo que está mal».
Por último, Madroñero dio «gracias a Cristo Redentor porque nada en esta tierra ocurre si él así no lo decide».