El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, trasladó la sede de Gobierno a la ciudad de Guayaquil, ante las continúas protestas que se desarrollan en la capital.
Moreno ofreció un mensaje en cadena nacional para informar el traslado de la sede de Gobierno, de Quito a Guayaquil, dado que este lunes un grupo de personas manifestaran cerca del Palacio de Carondelet.
«Me he trasladado a Guayaquil y he trasladado la sede del Gobierno a esta querida ciudad de acuerdo a las atribuciones constitucionales que me competen», indicó el mandatario ecuatoriano.
En su alocución, Moreno responsabilizó al exmandatario Rafael Correa de auspiciar las protestas para provocar un golpe de Estado.
A su juicio los actos violentos que se han registrado son realizados por individuos externos pagados y organizados, mientras que organizaciones de derechos humanos, entre ellas la ONU, denuncian la brutal represión que practican los funcionarios de la policía contra los manifestantes.
“Hay una intención política organizada para desestabilizar el Gobierno y romper el orden constituido y romper el orden democrático”, alertó.
Agregó que no era coincidencia que varios líderes del Gobierno de Correa hayan viajado a Venezuela, en los últimos días, y acusó que hayan ido a preparar los planes de desestabilización.
El saqueo y vandalismo no son manifestaciones ciudadanas.
Demuestran la intención política de Correa, Maduro y de los corruptos que deben responder a la justicia y al país por desestabilizar este Gobierno democrático. #EcuadorPaísDePaz #DecididosACrecer pic.twitter.com/esyJv9RK5n— Lenín Moreno (@Lenin) October 8, 2019
Sin embargo, el pueblo ecuatoriano salió a las calles luego de la eliminación del subsidio a la gasolina por parte del jefe de Estado, lo durante décadas hizo que pudieran adquirirlo a un bajo costo.
«La eliminación de subsidios de combustible es histórica que quita de las manos de los contrabandistas miles de millones de dólares, la decisión asegura una economía sólida», justificó.
