La revista TIME de los EE.UU., acostumbrada a las portadas épicas, continuó su recia costumbre, esta vez con una visión distópica de lo que hereda Biden en su primer día en La Casa Blanca.
No es una foto, sino una ilustración. Lo cierto es que la imagen es la metáfora editorial del medio sobre cómo ve lo que dejó Trump y desde dónde empieza el nuevo gobierno demócrata: un desastre.
La portada es la escena de un salón oval vandalizado, con hojas sueltas y desordenadas en el piso.
El escritorio luce pintado con grafitis y encima un reguero de más papeles desarreglados que parecen revelar el desafío de un final de época caótico y un comienzo desalentador.
TIME's new cover: Day one https://t.co/VazxGDJzZf pic.twitter.com/R6jVrzXXZc
— TIME (@TIME) January 21, 2021
Mientras tanto, al fondo, mirando por la ventana se ve a un Joe Biden contemplando el paisaje de un país en llamas. El atardecer parece el ocaso ardiente de un país iluminado por la furia de un país dividido que expía sus frustraciones destruyéndolo todo.
La portada de Time parece una condena artística a Trump. Una visión sugestionada por el dramatismo de la toma al Capitolio que instigó el pasado 6 de enero.
Aquella jornada dejó 5 fallecidos, varias ventanas rotas, y la reputación por el suelo de la Democracia estadounidense.
Al mismo tiempo convirtió al país en la mofa del mundo, que interpretó en la escena el desmoronamiento patético de una potencia en decadencia.
El dibujo de la tapa de la revista es un potente pronunciamiento editorial del TIME, un estilo cultivado y cuidado por el medio durante años, convirtiéndose así en una revista, que sin exagerar, se puede leer toda “a primera vista”.