Grupos de contrabandistas y mafias que especulan con la venta ilegal de gasolina, han iniciado un nuevo modus operandi; con el transporte de combustible en la frontera entre la República Bolivariana de Venezuela y la República de Colombia.
En la misma región donde durante años operaron grupos dedicados a la extracción de combustible desde las regiones occidentales venezolanas de Táchira y Zulia, principalmente; se registran operaciones delictivas que abren un “mercado paralelo”.
Mediante la difusión de comentarios y denuncias en redes sociales, han circulado videos que corresponden a los supuestos cargamentos que preparan los contrabandistas, en territorio colombiano; para el ingreso por vías y métodos irregulares a Venezuela.
Se estima que el precio de venta impuesto en estas operaciones ilícitas, es al menos 6 veces mayor al monto establecido oficialmente en la nación neogranadina.
Es decir, mientras que en Colombia adquieren la gasolina por un precio de 0.55 dólares estadounidenses; los contrabandistas la venden en Venezuela en dólares por litro.
Circulan denuncias sobre el contrabando de gasolina, ahora desde Colombia hacia territorio venezolano, en medio de las dificultades por el bloqueo contra Venezuela. Usuarios afirman que el video corresponde a la primera semana de septiembre de 2020 #VenceremosElBloqueoPetrolero pic.twitter.com/uD5bPDJOiY
— JoséManuelBlancoDíaz (@jblancodiaz) September 12, 2020
¿Quién es el responsable?
La industria petrolera venezolana atraviesa por dificultades, consecuencia de las denominadas sanciones que impone el gobierno de Estados Unidos contra el país suramericano.
En enero de 2019, Donald Trump anunció el embargo de activos pertenecientes a Venezuela en territorio estadounidense, lo que devino en el robo de Citgo; filial de Petróleos de Venezuela (PDVSA) en Norteamérica.
Desde entonces, Washington ha incrementado las medidas de presión contra compañías y países que mantienen relaciones comerciales con el gobierno del presidente Nicolás Maduro, lo que impide la venta de petróleo y combustible; pero también la adquisición de repuestos e insumos para las refinerías nacionales.
Una publicación de la agencia de noticias AFP, del pasado 9 de septiembre de 2020, refiere cómo los contrabandistas que “antes se llevaban la gasolina más barata del mundo en caravanas clandestinas, como Marco; nombre ficticio para proteger la identidad, ahora hacen el recorrido al revés”.
Asimismo, aseveran que para el traslado de la gasolina “se emplean los mismos pasos ilegales”, terrestres o acuáticos, por los que transportaban el combustible desde Venezuela hacia Colombia, en meses y años anteriores.
Las pérdidas de Venezuela, como consecuencia del robo de combustible hacia Colombia durante al menos 20 años; se calcula en unos 5 mil millones de dólares anuales, es decir, más de 100 mil millones de dólares.