La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), ha transcurrido este año igual que en el 2019, sin mujeres. El año pasado, sólo 16 de las 192 intervenciones estuvieron a cargo de féminas, ni siquiera un 10% del total; ¿Y la igualdad de género?
Este miércoles, se escuchó el discurso de la primera mujer en intervenir, fue la presidenta de Eslovaquia, Zuzana Caputova; en las participaciones de los próximos días veremos si se repite la abismal desigualdad del 2019; o si por el contrario, el 2020 suma más lideresas al foro internacional.
Esta realidad, constituye un claro recordatorio del desequilibrio de género que existe en la política internacional. En esa línea, el secretario general de la ONU, António Guterres; manifestó en sus palabras ante la Asamblea General que en la actual crisis sanitaria, la mujer; constituye uno los sectores más afectados.
“Son también quienes realizan la mayor parte del trabajo de cuidado no remunerado generado por la pandemia. Y son además quienes tienen menos recursos económicos a los que recurrir; porque sus salarios son más bajos y tienen menos acceso a beneficios”, expresó.
Asimismo, señaló la necesidad de abordar lo antes posible la situación, ya que existe el peligro que «la igualdad de género retroceda décadas».
Violencia de género en pandemia
En este sentido, la pandemia no es solo una cuestión sanitaria; alrededor del mundo millones de mujeres han encontrado en las medidas de confinamiento social, un peligro aún mayor que el contagio de covid-19.
Si bien la medida, ha servido para mantener a alejado al SARS-CoV-2; también ha facilitado la cercanía de las mujeres víctimas de violencia con su agresor; junto al que deben cumplir la cuarentena establecida por los gobiernos.
En efecto, según cifras de la ONU, 243 millones de mujeres han sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja en el último año. La tendencia existente indica que, durante la crisis, hay un menor acceso a la salud sexual y reproductiva y un aumento de la violencia doméstica, asevera el organismo multilateral.
243 millones de mujeres han sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja en el último año.
Durante la respuesta a la #COVID19 debemos asegurar la disponibilidad de servicios de apoyo para las afectadas. https://t.co/G7lLUGJ4gi Via @ONUMujeres pic.twitter.com/Kny3DSCSeY
— Naciones Unidas (@ONU_es) June 27, 2020
Tareas para los gobiernos
1. Deben asegurar que las necesidades de médicas y enfermeras estén integradas en cada ámbito de las actividades de respuesta.
2. Asegurar que las líneas directas y los servicios dedicados a las víctimas de violencia contra la mujer se consideran servicios esenciales.
3. Los rescates y medidas de estímulo deben incluir medidas de protección social que reflejen las circunstancias especiales de las mujeres y reconozcan la economía asistencial.
4. Los líderes deben encontrar la forma de incluir a mujeres en la toma de decisiones de respuesta y recuperación. Incluir voces de mujeres en la toma de decisiones, tanto a nivel local como municipal o nacional.
5. Los responsables políticos deben prestar atención a lo que ocurre en los hogares y apoyar un reparto igualitario de la carga de cuidados entre hombres y mujeres. Es una gran oportunidad para «desestereotipar» los roles de género que están presentes en muchos hogares alrededor del mundo.
En conclusión, a 75 años de la Organización de Naciones Unidas, la igualdad de género sigue siendo una asignatura pendiente del mundo; en lo sucesivo veremos cuál será el espacio y situación de las mujeres en el mundo en la postpandemia. Si se cumple el pronóstico de la ONU, tocará recomenzar la lucha por la reivindicación de la mitad de la población del mundo.
