El congresista estadounidense, Jim McGovern afirmó que parte del Congreso estadounidense, está de acuerdo con el recorte presupuestario dirigido a la seguridad de Colombia, con ello pretenden que Estados Unidos no sea cómplice de la brutalidad policial en el país suramericano; pero, «si eso no resulta ser suficiente, se revisará nuevamente. Pueden esperar que la administración de Biden tomará seriamente todo lo relacionado con la protección de los Derechos Humanos»; manifestó el parlamentario en una entrevista a la revista Rolling Stone.
Es preciso recordar que el Gobierno de Iván Duque rechazó una serie de recomendaciones hechas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en el informe presentado tras su visita a Colombia luego de las innumerables denuncias de violencia policial. Sobre esto, el congresista estadounidense afirmó haber quedado «bastante decepcionado».
«La CIDH aportó 41 medidas y recomendaciones para proteger los derechos de los protestantes y la ciudadanía en general; teniendo en cuenta que debían ser aplicadas para responsabilizar a los autores de la brutalidad policial y prevenir futuros casos de violencia». Manifestó McGovern.
El funcionario destapó que «el gobierno de los Estados Unidos se ha asegurado de aportar millones de dólares en asistencia a la seguridad para el éxito del gobierno de ese país (Colombia)».
Asimismo comunicó que desde el Congreso, sus miembros tienen la responsabilidad de asegurarse de que dicha asistencia no sea en ningún momento coautora de situaciones que violenten los Derechos Humanos a manos del gobierno colombiano. De igual manera dijo que esperan que la administración de Biden tome una postura firme frente a los casos de violencia; donde sea que ocurra, incluyendo los Estados Unidos.
Gobierno de Colombia disfraza sus asuntos internos
Como de costumbre, el gobierno colombiano acusa y señala a Venezuela como responsable de un conflicto interno; que lleva más de 60 años sumergiendo a Colombia en la oscuridad de la guerra y el crimen. Sobre este tema, McGovern manifiesta: «Puedo decir que los conflictos sociales de Colombia no tienen nada que ver con Cuba o con Venezuela… tienen que ver con el conflicto armado interno de esta nación»
Señaló que es imperativo que el gobierno colombiano resuelva las inquietudes legítimas de los protestantes, para tratar de lograr que el país sea mejor en vez de apuntar el dedo hacia Cuba, Venezuela o cualquier otro Estado, y así ser responsable de sus propios problema. «Esa es una forma de desviar las críticas y evitar hacer algo que realmente aporte al país»; concluyó.
