A tan sólo horas de la línea bajada por el amo imperial, el Comando Unificado de la Oposición (C.U.L.O.) acató sin chistar. Desde Washington movieron el dedo y el C.U.L.O. se quedó quieto. Luego de semanas de inercia y desorientación, como ya les giraron instrucciones desde la Casa Blanca, la primera oposición ya sabe hasta dónde puede llegar. No tienen permiso de inscribir candidaturas para las elecciones parlamentarias del 06 de diciembre de 2020, no se los permiten.
Se confirma lo explicado por el vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, en entrevista exclusiva para el programa Maduro Guerra Live. Esta oposición no tiene autonomía para tomar sus propias decisiones, dependen únicamente de la pauta que les da su jefe máximo, Donald Trump. Si el mandatario norteamericano chasquea los dedos a la derecha el C.U.L.O. se moverá en esa dirección, si les dice stop, entonces el C.U.L.O., permanecerá inmóvil.
Mensaje de un recadero
En esta oportunidad no fue Trump directamente quien les bajó la seña. Utilizaron de recadero al “diplomático” y representante especial para Venezuela del Departamento de Estado, Elliott Abrams. Éste personaje calificó de “farsa” las elecciones venezolanas. Eso fue suficiente para que las 27 organizaciones políticas, que hacen vida en la primera oposición, salieran en comparsa a declarar un pacto de no participación en el proceso comicial.
La verdad es que cuando no se tiene autonomía no se pueden tomar decisiones propias. Pero además cuando una opción política está tan desprestigiada como el Guaidosismo y sus derivados, no les queda otra opción que rehuir la justa democrática. Sencillamente porque nunca han sido demócratas.
Cada vez que las facciones más serviles al imperialismo norteamericano han tomado el sendero abstencionista, los resultados obtenidos han sido desastrosos. En 2005 se retiraron de las parlamentarias de ese año y el pueblo chavista obtuvo una Asamblea Nacional completamente bolivariana. En 2017 se negaron a participar tanto en la Constituyente como en las municipales y el resultado fue una abrumadora victoria para el chavismo.
Como dirían en el llano: perro que come manteca mete la lengua en tapara. Las fuerzas revolucionarias trabajan arduamente en consolidar la unidad. Una participación unitaria y masiva del chavismo desde ya permite vislumbrar el rescate de la Asamblea Nacional. Sería una histórica y definitiva derrota al Trumpismo-Guaidosista que tanto daño ha hecho al país.
