Este miércoles, Lawrence McDonald, el antiguo vicepresidente del banco Lehman Brothers, que colapsó durante la crisis financiera de 2008, advirtió que 50 nuevos bancos estadounidenses podrían declararse en quiebra. Incluso antes de que las autoridades del país resuelvan los problemas estructurales actuales.
Al analizar la salida de fondos de las cuentas de las instituciones financieras estadounidenses, el exdirectivo (quien trabajó en Lehman Brothers durante la crisis financiera y fue responsable de la gestión de la deuda, además del comercio de valores convertibles), predijo que los «cientos de miles de millones de dólares» que perderán los bancos regionales en los Estados Unidos, irán a los grandes bancos y luego a los bonos del Tesoro.
Además, McDonald consideró que Washington se verá obligado a introducir una retención de fondos en depósitos bancarios que superará los de 250 mil dólares. De igual modo, indicó que así el Estado deberá aumentar las garantías sobre los depósitos, en comparación con las existentes.
El martes, Bloomberg (compañía de asesoría financiera, software e información bursátil estadounidense), informó que el Departamento del Tesoro de EE.UU. está estudiando la posibilidad de garantizar todos los depósitos bancarios. Esto en caso de un deterioro de la situación en el sector bancario, para lo cual pueden ser necesarios fondos del fondo de estabilización de divisas.
Cabe destacar que los problemas bancarios en la nación norteamericana iniciaron a principios de mes con las quiebras de Silvergate Capital Corp. y Silicon Valley Bank. Posteriormente quebró Signature Bank, de la que la Corporación Federal de Seguros de Depósitos de EE.UU. aprobó la venta de parte de los activos.