Con la muerte de 196 personas en últimas horas la cifra de fallecidos en la Franja de Gaza ascendió a 18.608 como consecuencia de los bombardeos indiscriminados contra civiles, informó el Ministerio de Salud en ese territorio.
En esta jornada, 499 personas resultaron heridas y elevó a 50.594 el total de lesionados desde el pasado 7 de octubre. Gran cantidad de personas continuaron bajo los escombros.
Según los últimos informes sanitarios, las fuerzas ocupación mantuvieron retenidos a varios directores de hospitales bajo interrogatorios y sometidos a torturas.
Cabe destacar que la masacre israelí dejó fuera de servicio 22 hospitales y 52 centros de atención primaria. En el norte de la Franja de Gaza, a pesar de que ascendió la cifra de muertos; los militares insistieron en poner fin a la presencia de atención médica.
Por otro lado, la situación de insalubridad en los lugares donde están concentrados los desplazados es mortal debido a la falta de agua y propagación de epidemias.
Mientras la ayuda humanitaria, incluidos alimentos y medicinas, la acumulan en el cruce de Rafah, el régimen sionista endurece las restricciones y controles de entrada de asistencia sanitaria como nueva arma para matar a los heridos.
Por último, el Ministerio de Salud reiteró su petición de encontrar mecanismos para garantizar la salida de miles de heridos a recibir tratamiento en el extranjero y salvar sus vidas.