El incremento de los casos críticos de covid-19 que se ha registrado en Bogotá, durante los últimos días, ha forzado a las autoridades de la capital colombiana a decretar el alerta naranja para poder atender el aumento de pacientes que requieren atención médica en las unidades de cuidados intensivos (UCI).
La decisión fue tomada por la alcaldesa bogotana, Claudia López, en virtud de que el pasado domingo 14 de junio se reportaron 405 infectados de covid-19, que han sido ingresados a las UCI de la ciudad. Esto representa una tasa de ocupación del 55,94% de las camas disponibles para unidades de cuidados intensivos (724).
La flexibilización de las medidas de confinamiento, en medio de una explosión de la curva de contagios ha tenido como consecuencia una mayor expansión, tanto de los casos positivos, como de aquellos que se complican.
Peligroso afloje
“A medida que empezamos a flexibilizar se nos empezó a agravar la gente. Ya esta semana superamos el 50% de ocupación de UCI. No es dramático, pero estamos creciendo en el nivel de ocupación y todavía no han llegado los ventiladores que nos permita ampliar la capacidad. Vamos a tratar de que nos cuadre el incremento en la ocupación con la llegada de ventiladores, pero no nos podemos confiar”, admitió López.
En función de la declaratoria, a partir del próximo martes 16 de junio, el Distrito asume el control de las UCI bogotanas, tanto de la red pública como privada. El Centro Regulatorio de Urgencias y Emergencias (CRUE), será el encargado de definir a qué UCI irá cada paciente, quiénes ingresan primero y quiénes deben esperar.
La mitad adelante
Igualmente, se conoció que está en estudio un decreto con los precios a cobrar. El ministro de Salud colombiano, Fernando Ruíz, ha informado que los pagos se deben hacer con un anticipo del 50%, una vez confirmado que se trate de un paciente con covid-19.
Por otro lado, la alcaldesa López ha señalado que para el 23 de junio llegarán los 145 primeros ventiladores, para incrementar la oferta de camas UCI . Estiman que cada 15 días, se estén recibiendo alrededor de 120 nuevos respiradores para la capital colombiana.
“Modelos estiman que entre julio y agosto debe llegar el pico de la pandemia. Vamos a requerir más hospitalización y UCI, cada 15 días vamos a estar en premura, pero vamos a tratar de mantener la situación bajo control”, concluyó la funcionaria.
Nuestro país ha recibido en las últimas semanas la llegada de 1.500 connacionales infectados de covid-19 que regresan de Colombia. Las autoridades venezolanas estiman que en el vecino país hay un subregistro inferior 7 veces a las cifras suministradas públicamente.
