3.434 fallecidos y un total de 47.610 personas infectadas por Covid-19, dejan en evidencia las limitaciones del sistema de salud español y la poca o nula capacidad de respuesta de un gobierno que ha heredado políticas privatizadoras, propias de una economía neoliberal en decadencia.
Las cuantiosas denuncias realizadas por los ciudadanos y las organizaciones que defienden los Derechos Humanos en este país, quedan cortas ante los penosos hechos que parecen quedar impunes, como la muerte de decenas de ancianos abandonados en hogares de cuidado y las condiciones precarias con las que labora el personal de salud.
La ultraderecha no descansa ni en los peores momentos. Por el contrario, pareciera encontrar en ellos la mejor oportunidad para avanzar en un sus planes segregacionistas. Tal es el caso del grupo parlamentario del partido español VOX, que ha planteado ante el congreso, una propuesta para incluir en las medidas del estado de alarma, el condicionamiento durante la actual situación de emergencia, de la atención médica a los inmigrantes en situación irregular.
«Los extranjeros que no sean titulares de una autorización para residir en territorio español, podrán obtener la prestación de asistencia sanitaria del Sistema Nacional de Salud mediante el pago de la correspondiente contraprestación o cuota derivada de la suscripción de un convenio especial»
Esta posible privación del derecho a la salud gratuita de la población migrante, va acompañada por una propuesta de “Expulsión inmediata del territorio español”, una vez termine la contingencia. Dejando expuesto el interés de este partido de “matar dos pájaros de un tiro” ante la incapacidad de la Unión Europea (UE) de abordar la compleja situación migratoria.
Esta propuesta, aunque insólita, no sorprende. Si algo no ocultan los parlamentarios de VOX, es su afinidad con el fascismo, evidenciada en su propuesta de derogatoria de la ley de Memoria Histórica, que condena los crímenes del Franquismo y la ley de 2017 que protege los derechos fundamentales del colectivo LGTB.
Entre ultraderechas te veas
Los parlamentarios del partido VOX, Santiago Abascal e Iván Espinosa de los Monteros, han sido los principales defensores de la presidencia interina imaginaria en el parlamento Español, que ha usado para atacar al vicepresidente Pablo Iglesias del partido de Centro Izquierda PODEMOS, llegando al punto de retar al gobierno de Pedro Sánchez, al recibir con bombos y platillos al autoprocloamado.
Nos llevamos de España el compromiso, el impulso y la unión para tomar acciones y lograr una Venezuela libre, con una democracia duradera. Gracias @Santi_ABASCAL y @vox_es por el recibimiento. #AgendaInternacionalMadrid https://t.co/DfZX4zeKTn
— Juan Guaidó (@jguaido) January 25, 2020
El acercamiento de Juan Guaidó a este controvertido grupo de poder, ratifican sus raíces, sus debilidades fascistas y su hipocresía ante la situación que atraviesan los migrantes venezolanos en el mundo, humillados y maltratados por sus aliados.