La inmensa cantidad de memes y chistes es directamente proporcional al esfuerzo que hacen los intensos y pseudointelectuales por obviar un asunto que, así sea para burlarse, le interesa a todo el planeta.
Cada quien se despecha como le da su regalada gana, esa mujer tiene el derecho de hacer con su vida y su carrera lo que «le salga del forro» o lo que salga de su equipo de creativos y mercadeo. Está ganando plata como arroz picado.
Más allá de los memes, hay un fenómeno aquí que vale la pena analizar, la Industria del Marketing, la Industria de la Música y la Industria de la Comunicación acaba de dar indicios de una posible nueva era. Todos los números están quedando atrás.
Métanle ojo (y oído) y luego discuten si la canción es buena o no y todo ese asunto. Porque después se quejan cuando sus planes de ventas, estrategias de mercado y sus creaciones (canciones, películas, pinturas, poemas, etc) fracasan comercialmente. El mundo cambió.
Hay que estudiar la realidad y las transformaciones que se producen en la vida real, sobre todo cuando éstas competen a nuestro trabajo (productores, escritores, creativos, publicistas, compositores, comunicadores, periodistas y creadores en general).
Shakira acaba de hacer una canción que en menos de 24 horas escucharon más de 55millones de personas (ya lleva 80millones). Eso es mucho para una canción, para una campaña publicitaria, para cualquier cosa.
¿Cuánta gente vio la final del Mundial?
Para pensar.
VLADIMIR SOSA SARABIA
