El estado brasileño de Amazonas declaró toque de queda este sábado. La restricción durará todo el día por una semana a partir de este lunes 25 de enero. El anuncio se da en medio de la grave crisis sanitaria causada por la propagación de la covid-19 en Manaos, capital de la entidad.
Desde hace poco más de una semana, los más de 2 millones de habitantes de la región brasileña acatan un toque de queda de 11 horas, entre las 7 de la noche hasta las 6 de la mañana.
Debido al incremento de los casos en el Amazonas y las más de 7 mil muertes por la covid-19, que le convierten en el estado con mayor proporción de decesos, el gobierno estadal de Wilson Lima decidió ampliar el toque de queda hacia las 24 horas del día, por lo que se limitará el tránsito y algunas actividades en la zona, con el fin de evitar aglomeraciones, reducir la tasa de infección y hacer frente al colapso que sufre Manaos por la falta de camas y oxígeno en los hospitales, ante la inoperancia y el abandono del gobierno del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
As medidas foram tomadas após reunião do Comitê de Enfrentamento da Covid-19 e representantes do comércio e serviços, além de órgãos de controle. #GovAM
— Governo do Amazonas (@AmazonasGoverno) January 24, 2021
Abandono de Bolsonaro es igual a crisis
Dirigentes del Partido de los Trabajadores (PT) señalan a Bolsonaro como responsable de la catástrofe en Amazonas.
«Las personas se asfixian en Manaos por falta de oxígeno en los hospitales y en lugar de proporcionar ayuda federal, Bolsonaro politiza las muertes y critica a las autoridades locales por no adoptar el tratamiento con (medicamento) cloroquina, que no es eficaz para la covid-19. Es un ser despreciable», recalcó Gleisi Hoffmann, presidenta del PT.
De igual manera, para el exministro, el Gobierno de Bolsonaro patrocina un genocidio en Manaos y denunció que el colapso de la salud fue una tragedia anunciada. Agregó que Bolsonaro y Pazuello (actual ministro de la cartera sanitaria) son incapaces de proporcionar ni siquiera la mínima ayuda a la población. «Las personas están sin oxígeno y la ciudad se dirige hacia una de las mayores crisis de salud pública jamás vista en el país», apuntó.
Venezuela solidaria
Es preciso recordar que el gobierno venezolano de Nicolás Maduro, partiendo del principio de solidaridad, envió una caravana de 6 camiones cargados con 136 mil litros equivalentes a 14 mil bombonas individuales de oxígeno para atender y aliviar la crisis en Manaos; ciudad fronteriza con Venezuela.
Bolsonaro se burló de la llegada del oxígeno enviado por el gobierno bolivariano, además de esto, irrespetó la figura de Maduro como presidente de Venezuela y se negó a aceptar con buena voluntad el gesto de solidaridad.
