Al sábado 30 de mayo, Venezuela reporta 89 nuevos casos por covid-19, de los cuales 40 son de transmisión comunitaria y 49 importados de otros países. Con estos, la nación suramericana totaliza 1.459 contagios por esta enfermedad viral y pandémica, según informó la tarde de este sábado el presidente de la República, Nicolás Maduro, desde el Palacio de Miraflores, en Caracas.
De los 40 casos comunitarios, 32 son del foco activo en Maracaibo, con epicentro en el mercado Las Pulgas. Aseguró que «nuestro equipo médico y científico ha iniciado una investigación del genoma de este virus porque es muy agresivo y contagioso. En dos días mató a dos pacientes y ha lanzado a gravedad a otro grupo».
Los 8 comunitarios restantes para completar los 40, incluyen a una mujer de 43 años de edad, natural del estado Bolívar trabajadora de Corpoelec; una mujer de 26 años de Valles del Tuy, estado Miranda; una mujer de 57 años de la parroquia caraqueña La Vega; otra mujer de 37 años, natural de Caricuao (Caracas); una mujer de 35 años del municipio Pedro Camejo de Apure; una mujer de 30 años de San Antonio del Táchira, contagiada por su esposo que dio positivo; un niño de 8 años de San Antonio del Táchira, hijo de la pareja anterior; un niño de 5 años, de la misma familia. Todos estos casos están ingresados en centros asistenciales y bajo el tratamiento respectivo, aseguró Maduro.
Los 49 importados se desglosan así: 22 connacionales provenientes de Colombia (12 que entraron por el estado Táchira y 10 por Zulia), 20 de Brasil que regresaron por Bolívar, 2 de Surinam que ingresaron por Nueva Esparta, 1 de Ecuador que entró por el Zulia y 4 por contacto extranjero. El mandatario insistió en que estos contagios que llegan desde el exterior siguen siendo el 80% del total de casos que registra Venezuela por el nuevo coronavirus, razón por la cual «la frontera sigue siendo un problema».
«Tenemos algunos focos detectados, de los cuales el más grave es el del mercado Las Pulgas, en Maracaibo, que es un foco preocupante (…) Ya hemos tomado las medidas de máxima restricción». No obstante, «Venezuela está preparada para entrar en una nueva fase de normalidad relativa con un plan organizado y de disciplina en beneficio de la sociedad y la economía», dijo en referencia a la fórmula de flexibilización 5 + 10 que comenzará a regir a partir de este lunes primero de junio. Consiste en 5 días continuos de flexibilización por sectores económicos y franjas horarias, seguidos de 10 días de cuarentena.
«Lo que hacemos es un esfuerzo inmenso de proteger a nuestra gente pero hay mucha gente que no se da cuenta de los derechos que tiene en su Patria y solo se da cuenta cuando se va a sufrir al extranjero», dijo, al comparar la atención médica gratuita en Venezuela y los sistemas privatizados de países gobernados por la derecha como Chile, Ecuador y Bolivia.
Venezuela ha practicado hasta la fecha, especificó el Jefe de Estado, 970.394 pruebas diagnósticas; «esto quiere decir una inversión de más de 200 millones de dólares. La prueba es absolutamente gratuita a toda la población. No importa de quién se trate: un empresario de alcurnia, un campesino, obrero, oficial. Es la primera línea que ordené: pruebas masivas. Y acabo de dar la orden de conseguir 10 millones de pruebas más para hacerlas entre junio y julio. Es la clave: testear (…) Hemos cumplido la primera línea. Estamos preparando todo el arsenal para cumplir la meta de 10 millones, con la ayuda del mundo», culminó.
