El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechazó la «ostentación imperialista» que constituye la ejecución de ejercicios militares con la utilización de un submarino nuclear estadounidense en aguas del Mar Caribe, con la participación de las Fuerzas Armadas de Colombia.
De esta manera, la administración del presidente Nicolás Maduro, a través del vicepresidente sectorial de Soberanía Política, seguridad y Paz, Vladimir Padrino López; señaló que la maniobra no es más que una réplica de expansión que mantiene la Organización para el tratado del Atlántico Norte (OTAN).
¿Para qué tanta ostentación imperialista?¿Es una réplica de la expansión Otanista en el Mediterráneo de América? El narcotráfico, la guerra en Arauca, los asesinatos sistemáticos y los grupos terroristas no se combaten con submarinos nucleares. Lo rechazo de manera categórica. pic.twitter.com/aDeLONv5AO
— Vladimir Padrino L. (@vladimirpadrino) February 28, 2022
Por esas razones, el también ministro del Poder Popular para la Defensa dejó claro su rechazo categórico; en torno a las acciones en las cuales estuvo presente el submarino nuclear USS Minnesota. De esta forma lo aseveró el propio titular de Defensa colombiano, Diego Molano.
De igual forma, el jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), general en jefe Domingo Hernández Larez definió al gobierno colombiano como «sin vergüenza» por incurrir una vez más en provocaciones contra la nación venezolana.
Además, parafraseó «el pensamiento bolivariano sobre los tránsfugas y errantes, catalogados como seres sin escrúpulos y con el alma corrompida; quienes creen que los lazos que los unen al imperio del Norte contra sus hermanos son lazos consanguíneos».
En aguas del Caribe, a 130 kilómetros de Cartagena, se realizaron ejercicios militares entre la Armada de Colombia y la Marina de Estados Unidos https://t.co/k1NhZsen6A pic.twitter.com/2hORtml2yZ
— Noticias Caracol (@NoticiasCaracol) February 28, 2022
¿Temor o amenaza?
Los ejercicios militares conjuntos entre los gobiernos de Colombia y Estados Unidos en el Mar Caribe, muy cerca de territorio venezolano, coincide con el avance de la operación militar especial que la Federación de Rusia adelanta ante la amenaza de Ucrania y con una reunión entre el «embajador» James Story y opositores venezolanos.
También se recordará que hace 2 semanas las autoridades colombianas denunciaron la supuesta presencia de militares rusos en la región fronteriza venezolana. Todo esto, como parte de los mecanismos de cooperación que mantienen Caracas y Moscú.
Igualmente, se conoció sobre la protesta que desde las cúpulas de poder colombianas circularon en medios y redes sociales; por la presunta existencia de equipamiento estratégico ruso en la frontera. Específicamente se refirieron a la instalación de 5 potentes radares en Zulia, Táchira, Apure, Falcón y Caracas.
«Fuentes de la inteligencia militar colombiana confirmaron que la instalación de estos radares se dio de manera simultánea hace 10 días, cuando una legión de hombres rusos arribaron a la zona fronteriza, se quedaron cuatro días y regresaron a Caracas a armar el del centro militar de Tiuna», reseñó el portal web elcolombiano.com.
