En Sesión Plenaria de la Conferencia de Desarme, el representante Permanente de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y demás Organismos Internacionales, el embajador Alexander Yánez, denunció enérgicamente el reciente despliegue militar de Estados Unidos (EE. UU.) en aguas del Caribe cercanas a las costas venezolanas.
En nombre del pueblo y del Gobierno Bolivariano, el diplomático expresó su profunda preocupación por la presencia de destructores, aviones de combate y un submarino nuclear de ataque rápido, el USS Newport News, acompañado de un contingente de cuatro mil efectivos militares.
Señaló que este despliegue, representa una grave amenaza para la estabilidad regional y una violación flagrante del artículo 2, numeral 4, de la Carta de las Naciones Unidas, que prohíbe el uso o la amenaza del uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado.
El representante venezolano recordó que América Latina y el Caribe han sido declaradas como zona libre de armas nucleares desde la firma del Tratado de Tlatelolco en 1967, cuyo Protocolo Segundo fue ratificado por Estados Unidos en 1971. “La presencia de un submarino nuclear de alcance ofensivo en la región contradice este compromiso histórico y pretende ser un acto de intimidación contra un Estado soberano”, afirmó.
Asimismo, Yánez destacó la vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, adoptada por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en 2014. Esta declaración, reconocida por la ONU, reafirma el compromiso regional de evitar la amenaza o el uso de la fuerza.
Desmontando las justificaciones
El embajador Alexander Yánez rechazó las justificaciones de EE. UU. Yánez citó informes que muestran a Venezuela como un territorio libre de cultivos ilícitos. Solo el 5% del narcotráfico hacia EE. UU. pasa por el Caribe. El 87% del narcotráfico ocurre en el Pacífico. «Allí no hay despliegue militar ni exposición mediática», señaló Yánez.
Además, cuestionó la efectividad de las intervenciones militares estadounidenses en la lucha contra las drogas, señalando que en países donde el país norteamericano ha establecido bases militares, la producción de drogas ha aumentado. “¿Alguien ha visto un capo de la droga estadounidense preso? ¿Qué hace el sistema financiero estadounidense con el dinero del narcotráfico?”, preguntó retóricamente.
El diplomático alertó a la Conferencia de Desarme sobre el verdadero propósito de este despliegue militar: propiciar un cambio de régimen en Venezuela para apropiarse de su principal reserva de petróleo. “Como ocurrió en Irak, Siria y Libia, el único objetivo aquí es la intervención y el saqueo”, afirmó.
En este sentido, Venezuela exigió el retiro inmediato de todas las fuerzas militares estadounidenses de la región, incluido el submarino nuclear USS Newport News, y reclamó garantías verificables de que EE. UU. no empleará armas nucleares ni amenazará con su uso.
Durante la sesión, diversas delegaciones expresaron su respaldo a la posición venezolana. Irán, Belarús, Cuba, China, Rusia y Corea del Norte coincidieron en condenar el despliegue militar de Estados Unidos como una amenaza a la paz y la seguridad regional, y reiteraron su apoyo a la soberanía e integridad territorial de Venezuela.
El embajador Yánez concluyó su intervención citando al Libertador Simón Bolívar: “El valor y la habilidad, señor agente, suplen con ventaja al número. Infelices los hombres si estas virtudes morales no equilibrasen y aún superasen las físicas. El amo del reino más poblado sería bien pronto señor de toda la tierra. Por fortuna, se ha visto con frecuencia a un puñado de hombres libres vencer a imperios poderosos”.
El embajador reafirmó el compromiso de Venezuela con la diplomacia de paz. También, convocó a los Estados a preservar a América Latina y el Caribe como zona de paz..