Josep Borrell, representante de Política Exterior de la Unión Europea, calificó como positiva su conversación con las partes en disputa en Venezuela, luego de que se le solicitara el acompañamiento al proceso electoral del próximo 6 de diciembre. El español cuestionó las discordias y falta de unidad entre los opositores. Sin embargo, titubea ante la propuesta hecha por 107 partidos políticos de facilitar el acompañamiento internacional.
El diplomático no vaciló en señalar que ha mantenido contacto directo por instrucciones de los partidos de derecha.
«No me he lanzado al ruedo como un espontáneo. Empecé a hacerlo porque así me lo pidió el G4, elegido por el presidente Guaidó, para trasladar al régimen las condiciones mínimas que la oposición consideraba necesarias para participar en un un proceso electoral creíble», Borrell.
En su relato, el diplomático dejó claro que reconoce a Guaidó como «presidente», mientras tildó al Gobierno legítimo de «régimen».
Estos conceptos prefiguran la complicidad de algunos actores que amalgaman la ficción impulsada por Washington para atacar al pueblo venezolano.
"No me he lanzado al ruedo como un espontáneo. Empecé a hacerlo porque así me lo pidió el G4, elegido por el presidente Guaidó, para trasladar al régimen las condiciones mínimas que la oposición consideraba necesarias para participar en un un proceso electoral creíble": Borrell pic.twitter.com/p2lSS4K0ES
— NTN24 (@NTN24) October 7, 2020
Sin tutelajes
Fieles a la arrogancia, la Unión Europea desconoce a las autoridades legítimas y se deja influenciar por un grupo de políticos al servicio de una conspiración contra el pueblo.
Borrell en el Informe manifestó que «nos reunimos con todos los sectores y escuchamos los planteamientos para garantizar unas elecciones libres».
Pese a que ningún país ha realizado más elecciones que as 25 que cosecha Venezuela en los últimos 21 años, la Unión Europea insiste en su plan tergiversado.
También, sin pruebas algunas, acusó al país de violar los derechos y consideró que en Venezuela hay fuertes divisiones.
No habrá cambios de fecha
Uno de los punto de honor de la Unión Europea para venir a acompañar las elecciones es propiciar un cambio de fecha pero las autoridades han sigo enfáticas en asegurar que nada ni nadie puedo vulnerar el texto magno.
Esta será la quinta legislatura, después de las elecciones en 2000, 2005, 2010 y 2015, esta última ganada por la oposición, que destruyó el parlamento.
Después de cada una de esas elecciones se ha instalado sin demora el 5 de enero la junta directiva de la nueva asamblea.
