Sentenciado «vikingo» atacante del Capitolio

Este miércoles la fiscalía federal de Washington, sentenció a 41 meses de prisión a Jacob Chansley, el famoso «Vikingo» que estuvo involucrado en el asalto que se vivió en el Capitolio de EE.UU. el pasado 6 de enero.

Según informó la cadena NBC News, los fiscales federales de Washington solicitaron que Chansley, cumpliera 51 meses de prisión por sus actos vandálicos.

Además de 3 años de libertad condicional, Chansley deberá pagar 2 mil dólares en concepto de indemnización. Este líder del asalto al Capitolio, es partidario de la teoría de la conspiración de «QAnon», la cual considera a Donald Trump como una figura salvadora, y a los demócratas como caníbales satanistas.

El FBI lo califica de amenaza terrorista

Por su conducta y perfil psiquiátrico, Chansley está etiquetado por el FBI como potencial amenaza de terrorismo doméstico.

El «Vikingo» se convirtió en el personaje más reconocido y uno de los más fervientes simpatizante de Trump durante los acontecimientos violentos en la sede del poder legislativo norteamericano. Todo después que el entonces Presidente en un discurso ardiente, afirmara que su derrota electoral era el resultado de un fraude.

El 6 de enero pasado, Chansley, ingresó armado con una lanza y el torso desnudo a la sede del Senado. Se sentó en la silla reservada para el vicepresidente Mike Pence y dejó una nota que decía: “¡Es sólo cuestión de tiempo, se acerca la justicia!”.

Chansley fue detenido tres días después de los disturbios bajo cargos de ingresar en un edificio restringido sin autorización y con violencia. Desde entonces ha permanecido medio año entre rejas.

Asimismo en un memorando de sentencia, describieron al «Vikingo» como «el hombre con sombrero peludo, cuernos y una lanza». Sumado a eso fue añadido al documento la denominación del «rostro público del motín al Capitolio».

El juez federal de distrito Royce Lamberth en Washington, fue quien sentenció a Chansley de 34 años. Aunque es menos de los 51 meses que habían solicitado los fiscales federales. El castigo es uno de los más duros hasta ahora para un participante en el asedio al Capitolio.

“Lo que hicieron aquí fue horrible”, subrayó el juez al imponer la sentencia.