Anselmo José Zambrano Blanco, después de ver el fallido golpe de estado del 30 de abril de 2019, hizo un estudio de mercado y llegó a la conclusión de que lo mejor era alquilar trajes para dar golpes de estado, y por lo visto le va bien. Y le ha ido muy bien.
Cuando entré a la tienda, motivado por el cartel que estaba afuera donde se leía claramente: Se alquilan trajes y corbatas para dar golpes de estado, el dueño de la tienda, que estaba atendiendo a un cliente, me hizo una seña con la mano derecha para que esperara un momento. Me dijo que tomara asiento y leyera algo ahì, mientras atendía al señor Ramos. Así me dijo.
Tomé asiento. Tomé una revista que era un catálogo para escoger el traje de moda, camisa, correa y corbata. El señor al que estaban atendiendo se despidió riéndose con el dueño de la tienda y diciéndole: “Ya que uno no puede hacer un gobierno a su medida, por lo menos sí se puede hacer un traje a su medida. Hasta luego, malviviente”
El hombre me llamó desde el mostrador y le dije que era un reportero del semanario El Añorado Post, y le conté que lo quería entrevistar.
-¿Pero no me va a cobrar nada, verdad?. -Me dijo.
-Tranquilo, amigo.
– Usted dirá entonces, periodista.
– Quiero que me cuente cómo se le ocurrió montar este negocio. Primero me dice su nombre y luego arranca a contar.
– Muy bien. Me llamo Anselmo José Zambrano Blanco. Y viendo lo que pasó el 30 de abril de 2019, donde un hombre a las tres de la madrugada se presentó en La Carlota para saludar a los golpistas, me dije: “Aquí hay una oportunidad de negocio, un nicho de negocio. Y realice un estudio entre varias personas y decidí montar el negocio, porque para los golpistas es muy práctico. Ya salen dispuestos a juramentarse, eso sì, si triunfa el golpe.
-¿Ya ha tenido clientes?
– Varios han venido. Y varios han alquilado. Eso sì, un poco asustados al principio, pero una vez que se ponen el traje sienten que están en el poder. Incluso, creo que algunos de ellos duermen con el traje y la corbata puestos, por si acaso pasa algo en la madrugada ya están listos para salir a apoyar.
– Ese señor que salió yo creo que lo conozco, ¿ya alquiló su traje?
– Ese señor ha alquilado varios trajes. Tiene uno para todos los días. Vino a decirme que el próximo traje se lo hiciera más corto de mangas, porque parece que se le acortaron los brazos, según él, porque ya como que no le alcanzan los brazos para coger lo que le toca.
-¿Y usted no teme que el gobierno le cierre el negocio?
– El gobierno tiene que entender que yo soy un emprendedor y que hay libertad de empresas. Además, al gobierno le conviene este negocio, porque ya saben de una vez quiénes son los golpistas.
En ese momento entró un señor con un traje en la mano y dijo desde la puerta:
-Anselmo, vengo a traerte el traje, porque ya tengo un mes con èl y este autoproclamado es pura bulla, ya nadie le cree y yo como que estoy perdiendo esos reales.
Anselmo pidió permiso y se acercó al hombre y le dijo:
-Es verdad que con ese autoproclamado no se llega a ninguna parte, pero parece que los que vienen son los gringos, y ya el Comando Sur dijo que estaba dispuesto.
– Si la cosa es así, entonces me lo llevó por unos días más. –dijo el hombre y salió.
Cuando Anselmo Zambrano Blanco volvió, le pregunté.
-¿Qué otras ventajas tiene alquilar estos trajes?
– Si el golpe fracasa, usted se puede ir para una embajada y llegar en traje de gala a pedir asilo, que es como se debe llegar a una embajada, no en franelitas y chaquetas. Así que si el golpe triunfa, usted está listo para juramentarse, y es bueno que la foto, que se va a ver en todo el mundo, muestre a un hombre elegante, que eso siempre genera una buena imagen para el gobernante. Muchas ventajas, como usted puede ver.
Me despedí de Anselmo, y cuando salía de la tienda, se me acercó y me dijo:
-Además, amigo, es bueno que uno le gane algo a estos golpistas, porque esta gente nos está robando y no deja nada.
ROBERTO MALAVER
