El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Joe Biden, anunció una nueva política migratoria, que consiste en expulsar a quienes crucen de manera ilegal al país a través de la frontera con México.
La nueva política migratoria que entró en vigencia desde este miércoles la anunció el Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en inglés).
“Con vigencia inmediata, los venezolanos que ingresen a Estados Unidos entre puertos de entrada, sin autorización, serán devueltos a México“, citó el comunicado.
El DHS devolverá a México a la mayoría de venezolanos que sean interceptados después de atravesar la frontera sur; las expulsiones serán llevadas a cabo bajo el Título 42, una normativa de salud pública impuesta al inicio de la pandemia.
El anuncio llega luego que las autoridades estadounidenses hayan llegado a un acuerdo con México, para reducir el número de personas que llegan por la frontera suroeste.
Sin embargo, la medida no aplicará a los migrantes que hayan ingresado a territorio estadounidense antes del anuncio.
Previo al anuncio, los venezolanos que llegaban a suelo estadounidense gozaban de libertad condicional humanitaria, lo que les permitía quedarse para tramitar una solicitud de asilo en el país.
Otro de los aspectos de esta política migratoria es que permitirá a 24 mil venezolanos emigrar “de manera legal y segura” al país norteamericano.
Para aplicar al programa, los venezolanos interesados deberán demostrar que tienen un patrocinador en EE.UU. que pueda acreditar que tiene los recursos financieros por el periodo de tiempo que los migrantes vayan a residir en el país.
Pero, para optar por este programa los venezolanos interesados deberán demostrar que tienen un patrocinador en EE.UU. que pueda demostrar que tiene los recursos financieros por un periodo de hasta dos años para mantenerlo.
Además, los beneficiarios deberán pasar una evaluación de “seguridad nacional y seguridad pública”, indicó DHS en un comunicado.
El anuncio de Biden no solo busca reducir la migración ilegal, sino que surge como parte de una estrategia política de cara a las elecciones de medio mandato, que se celebrarán en noviembre próximo.
Vale recordar, que los republicanos mantienen una campaña contra los gobernadores demócratas sobre la migración; a quienes les han mandado autobuses con inmigrantes para que atiendan la situación.