El Partido Republicano de Estados Unidos logró este miércoles ser mayoría en la Cámara de Representantes del Congreso, tras obtener 218 escaños, por lo que ahora controlarán la legislación fiscal y el presupuesto del país norteamericano.
De acuerdo a los últimos reportes, los republicanos tendrán en total entre 218 y 223 representantes en la cámara de 435 escaños.
Por el momento, los demócratas cuentan con 210 escaños, 11 menos que en los comicios anteriores, aunque aún restan plazas por asignar.
Esta mayoría es mínima, pero suficiente para estancar la agenda del presidente estadounidense Joe Biden para los próximos dos años.
Por su parte, los demócratas lograron mantener la mayoría mínima que tienen el Senado durante las elecciones, evitando así la “marea roja” que muchos anticipaban.
Con estos nuevos resultados, se refleja que EE.UU. tendrá un Gobierno dividido a partir de enero cuando asuman los nuevos representantes.
Algunos republicanos responsabilizan al expresidente Donald Trump de no haber logrado la “marea roja”, dado que los candidatos que él apoyó no eran aceptados por los estadounidenses.
Asimismo, los resultados pondrá fin al segundo mandato en la Cámara Baja de la demócrata Nancy Pelosi y se rumora que el sustituto de para su cargo será Kevin McCarthy.
A pesar de esta derrota, recientemente Biden calificó al 8 de noviembre como “un buen día para la democracia” en EE.UU.
“Si bien la prensa y los expertos predijeron una gigante ola roja (por una supuesta mayoría republicana), no sucedió”, expresó.
¿Qué implica un Gobierno dividido en EE.UU.?
En EE.UU. cada Cámara puede iniciar un proceso legislativo, pero el proyecto de ley lo tienen que aprobar las dos, antes de enviarlo al presidente para que lo firme y lo convierta en ley.
Una ley puede morir en cualquier fase si una de las cámaras vota en contra, o si el presidente la veta.
La tarea de unir a los republicanos en el Congreso recaerá en buena medida sobre Kevin McCarthy, nominado para asumir el liderazgo de la nueva mayoría del partido en la cámara baja.
Si McCarthy logra esa unidad, Biden tendrá más problemas para avanzar su agenda.
