El ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, denunció este lunes que parte de los mercenarios contratados para el magnicidio contra el presidente de Haití, Jovenel Moïse; ingresaron en 2020 a La Paz para atentar contra el actual mandatario Luis Arce.
Del Castillo presentó pruebas sobre un intento de magnicidio que realizarían los implicados en el del presidente de Haití, pero que iría dirigido contra el actual mandatario de Bolivia, Luis Arce.
Min. Gobierno, Eduardo del Castillo denunció que gobierno de facto planificó y fracaso en la ejecución de un atentado contra la vida de Luis Arce, ya electo Presidente. Contrataron mercenarios que luego asesinaron a Pdte. Haití. El plan no ha sido desechado, advirtió. @teleSURtv pic.twitter.com/qp9NR54FNV
— Freddy Morales (@FreddyteleSUR) October 18, 2021
Un reportaje de la revista Intercept reveló que los paramilitares y mercenarios ingresaron en 2020 a Bolivia, tras ser contratados por el exministro de Defensa de Jeanine Áñez, Fernando López.
Entre las pruebas presentadas están audios, modelos de contratos y correos electrónicos a los que tuvo acceso el Gobierno de Bolivia; los cuales se le interceptaron a López.
“Tenemos entendido que, de acuerdo a información que estamos proporcionando, que el señor López Julio tenía por objetivo quedarse con el poder, matando bolivianos, contratando sicarios extranjeros”, alertó.
Uno de los implicados en el plan contra Luis Arce es el colombiano Germán Alejandro Rivera García, quien está detenido por el magnicidio en Haití; e ingresó a Bolivia el 16 de octubre de 2020 (2 días antes de las elecciones).
Todos los principales organizadores y el jefe de la ejecución del Pdte de Haití estuvieron en Bolivia. Él fue capturado en Haití. Antes había estado en Bolivia. Se sabe que fue uno de los que captaba mercenarios para la operación de magnicidio. pic.twitter.com/LwOJQFZa7Q
— Patricia Villegas Marin (@pvillegas_tlSUR) October 18, 2021
El funcionario boliviano agregó que entre el 16 y 19 de octubre de 2020 ingresaron al país el colombiano Arcángel Pretel Ortiz y Antonio Intriago; ambos con la ruta Estados Unidos-Viru Viru.
Pretel era el enlace de la empresa de seguridad Counter Terrorist Unit Security (CTU) con sede en Miami, y está señalado de ser el reclutador para el magnicidio en Haití.
Del Castillo detalló que los mercenarios tenían previsto un contrato anual inicial de 125 mil dólares estadounidenses o 10.416 dólares mensuales.
Asimismo, indicó que a Bolivia también ingresó el exintegrante de la policía colombiana Ronald Alexander Ramírez Salamanca; quien además tiene un amplio historial de viajes a Haití.
El grupo de mercenarios que ingresó a Bolivia se hospedó en un hotel en La Paz y en otro en Santa Cruz; donde se reunieron con altos funcionarios del Gobierno de facto de Jeanine Añez.