Para el analista director de la empresa encuestadora Datanálisis, Luis Vicente León, el opositor Juan Guaidó busca un nuevo proceso de diálogo con el gobierno del presidente Nicolás Maduro «porque no tiene otro remedio».
Así lo expresó León en una entrevista que concedió recientemente, en la cual afirma que, de no haber reaccionado con el cambio de discurso; el resto de la vocería de la derecha hubiese seguido adelante con la petición de diálogo. Así, el supuesto gobierno interino terminaba de quedar «como la guayabera: por fuera».
Añadió León que «Guaidó, el G4, Leopoldo López, olfatean correctamente el problema, deciden reorientar su estrategia original; aparecer en el juego y tratar de rescatar el protagonismo de ese proceso».
Por otra parte, afirmó que mientras los voceros de la ultraderecha se quedan en discursos internacionales y controlando el dinero de Venezuela en el exterior, avanzan camino a la irrelevancia sin ninguna posibilidad de influencia real.
Factores extranjeros
De igual forma, Luis Vicente León expone la posibilidad de que se presenten escenarios de presión sobre Guaidó, desde los gobiernos de Estados Unidos y Europa, al ver que la ultraderecha pierde cada vez más espacios y decida por la alternativa de buscar acuerdos para salvar su presencia en el escenario político.
León señaló, asimismo, que existe una cantidad de líderes regionales que no están dispuestos a ignorar el proceso de elecciones, ante la posibilidad de ocupar algunos espacios. «Con esto no vamos a sacar a Maduro del poder; el objetivo es reconstruir la fuerza opositora para seguir la lucha», señaló.
Sin embargo, añadió que esos factores internacionales tratan de que otros voceros, como Capriles Radonski se incluyan también en la eventual negociación. El objetivo es tener otras fichas alternativas, en caso de que el grupo de Guaidó no ceda en ese sentido.
«Guaidó era como el cuarto hijo de la reina Isabel y lo pusieron de heredero con los otros 3 vivos». Así lo expresó León para ilustrar que el exdiputado no era naturalmente quien poseía el liderazgo en la derecha, ni el soporte partidista o el número de diputados que le permitiera retar al chavismo.
Dijo, igualmente, que quienes dirigen desde afuera a los voceros oposicionistas venezolanos; están claros en que en el país la opción factible en materia política son las próximas elecciones regionales. Ante tal escenario prefieren participar antes de «quedarse en el sofá perdiendo y pulverizando su participación política».