En caso de que los países de la OTAN permitan a Ucrania el uso de armamento occidental contra objetivos en territorio ruso, esto traerá «graves consecuencias» según dijo el presidente Vladimir Putin, quien envió un contundente mensaje a Occidente en alusión a un posible envío de armas para tal fin.
Justamente este martes 28 de mayo, el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que buscaba permitir a Kiev “neutralizar” las bases en Rusia. Por esta razón, el líder de Rusia señaló que, especialmente los países pequeños, “deben ser conscientes de con qué están jugando. Deben recordar que, por regla general, se trata de Estados con territorios pequeños, pero densamente poblados”.
El mandatario ruso en su mensaje hizo énfasis en que al recibir este tipo de amenazas por parte de algunos países europeos, “ese factor es el que deben tener en cuenta antes de hablar sobre el lanzamiento de ataques contra el interior de territorio ruso”.
“Esta constante escalada puede tener graves consecuencias y si esas graves consecuencias se hacen notar en Europa, ¿Cómo reaccionará Estados Unidos?”, señaló Putin, quien aludió a la paridad nuclear entre ambas superpotencias. “¿Acaso desean un conflicto global?».
Es importante resaltar que varios países miembros de la OTAN han enviado armamento a Ucrania en el desarrollo de esta operación militar especial que emprendió Rusia hace meses. No obstante, la condición que impusieron estos países es que no se emplee ese material para atacar posiciones militares en suelo ruso, pero el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, aseguró esta semana que ha llegado la hora de que se levante esa restricción y justificó que atacar objetivos militares en suelo ruso, es una forma de legítima autodefensa.
Igualmente, el Alto Representante para Política Exterior, Josep Borrell, señaló que existe un fuerte debate en el seno del bloque entre algunos Estados miembros que «se oponen firmemente» a levantar las restricciones al uso de armamento occidental mientras que «otros están a favor», como Francia y Polonia».
Entretanto, Dmitry Bogdanov, jefe del departamento de guerra radioelectrónica de las Fuerzas Aeroespaciales Rusas, explicó que los drones ucranianos tienen la capacidad de atacar hasta 2.500 kilómetros (1.553 millas) dentro de Rusia, pero que la capital, Moscú, está protegida de sus ataques y sugirió que una amplia franja de territorio ruso que limita con Ucrania sí es vulnerable a posibles ataques.