Con la firme intención de impulsar el comercio y combatir el contrabando y la corrupción de funcionarios de Colombia y Venezuela, el presidente, Gustavo Petro, ordenó este jueves el cierre de los numerosos pasos irregulares conocidos como las trochas; que aún existen en la frontera entre ambos países.
Desde Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, en una jornada de los Diálogos Regionales Vinculantes, el mandatario neogranadino aseguró que el impacto económico esperado con la reapertura total de la frontera, que él mismo encabezó hace un mes, no ha sido importante ni lucrativa; ya que el comercio de mercancías continúa haciéndose a través de las trochas.
«Al cabo de un mes por allí solo han pasado dos millones y medio de dólares en productos para aquí y para allá. ¿Y el resto de los productos por dónde está pasando?»; se preguntó el mandatario.
«Abrimos el puente, nos dimos la pela, corrimos el costo político y la economía sigue pasando por la trocha, porque allí, uniformados y funcionarios de allá y de acá, están cobrando la comisión», afirmó. Agregó que «Vamos a hacer cambios de este lado y voy a solicitar cambios de ese lado»; dijo en referencia a Venezuela.
Petro ordenó a su ministro de Comercio, Industria, y Turismo, Germán Umaña, cerrar los pasos ilegales: «Esas trochas se cierran, porqué se cierran», sentenció Petro.
Frontera legal para todos
«Queremos abrir la frontera, no para que los camiones pasen por la trocha y le paguen el ají a las fuerzas estatales de uno y otro lado, contrabandeando, sino que queremos que pasen por el puente», subrayó Petro en un discurso ante unos 5 mil asistentes.
El presidente enfatizó que tanto el puente Simón Bolívar como el Francisco de Paula Santander, que comunican a Norte de Santander con el estado venezolano del Táchira, no se abrieron «para que a los vivos de aquí y de allá se les llenen los bolsillos y se enriquezcan».
Igualmente, afirmó que si para eso tiene que hablar con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, lo hará, «porque esta frontera es para la gente, no para las mafias».
Hasta el momento, la circulación de personas sigue siendo limitada y el paso de camiones de carga, que fue un símbolo de la reapertura, es de tres al día en promedio.
Con información de Agencias.