El martes 3 de noviembre se concretó el proceso de la elección presidencial en los Estados Unidos, que determinará quién gobernará esa Nación por el periodo 2021-2025.
¿Como se determina al Presidente en Estados Unidos?
El sistema de elección presidencial en EEUU es indirecto o de segundo grado, la población de ese país no decide directamente por su candidato a presidente, sino que lo decide un grupo de Electores (538 en total) que se distribuyen en todo el territorio estadounidense.
¿Cómo son elegidos los Electores?
A pesar que la población votante en la boleta electoral señala al candidato de su preferencia, los mismos realmente están votando por la lista de Electores, que fueron propuestos por cada partido en todos los estados de esa Nación, y estos electores comprometen su voto, en caso de resultar electos.
Por lo tanto, cada estado cuenta con un Colegio Electoral, cuyo numero varia de acuerdo al tamaño de la población, pero en total reúnen 538 votos electorales; por ejemplo: California cuenta con 55 Electores, Nueva York con 29, Washington con 3, y así hasta formar 538 Electores.
¿Quiénes realmente escogen al presidente en EE.UU.?
Una vez electos los 538 Electores, estos se reúnen en sus respectivos Colegios Electorales en los 50 estados, siendo ellos quienes de forma directa deciden por el presidente de su país. Lo cierto es que con este mecanismo no necesariamente la mayoría del voto popular aseguraría la presidencia al candidato más votado, por cuanto cada Elector no está obligado con su voto, por lo que puede votar por el candidato de su preferencia, indiferentemente de cual partido lo haya propuesto o el candidato que haya obtenido mayor voto en ese territorio.
¿Cómo? En la Constitución de Estados Unidos y en la Décimo Cuarta Enmienda se establecen solo excepciones, filtros, para escoger a los Funcionarios Electores, entre lo que se detallan, que no pueden ser senadores, representantes o personas con cargo de confianza en EEUU, también que no se hayan involucrado en una insurrección o rebelión contra el país y que no hayan brindado ayuda a los países determinados como enemigos de EEUU, de resto no se establece otro impedimento para ser elegido o descalificado como Elector. Por lo que cada Elector no está obligado a lo decidido por la mayoría del pueblo estadounidense.
En 2016, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump obtuvo casi 3 millones de votos menos (2,8 millones) que su contrincante Hillary Clinton, sin embargo, los Electores no votaron tal como prometieron, y decidieron a favor de Trump como presidente para el periodo 2017-2020. Así mismo ocurrió en el año 2000, cuando el candidato Republicano, George Bush hijo obtuvo mas votos electorales que votos populares (271), mientras que su contrincante, Al Gore obtuvo 500mil votos populares por encima de Bush.
Para ser presidente en Estados Unidos se debe reunir 270 o más votos electorales de los 538 existentes. Si un candidato gana, por ejemplo, con el 50,1% del voto electoral de los 29 Electores que corresponden a Nueva York, el mismo candidato se le proporcionan todos los votos, es decir los 29.
El sistema de elección presidencial en EEUU está muy lejos de ser un ejemplo para el mundo, ya que su población realmente no está votando por el candidato presidencial, sino que más bien supeditan su decisión a la determinación de un Representante Electoral que no está obligado a reflejar lo que decidió la mayoría. Un mecanismo muy elocuente para que el sistema de ese país asegure que dicha presidencia jamás estaría en manos de lo que ellos consideren insurreccionales al sistema impuesto o promotores de alguna rebelión en contra de las elites económicas que detentan el poder real en ese país.
Candidatos Presidenciales:
El sistema bipartidista en Estados Unidos concentra el poder de la nación en los representantes Demócratas y Republicanos, estos a su vez responden a las políticas y direcciones emanadas del lobby económico que financiaron su candidatura, ese Lobby o poder es lo que se le denomina “El Estado Profundo”, ese poder en esencia va en una misma dirección, aunque puede variar en las formas.
Para las elecciones del 3 de noviembre de Estados Unidos dos candidatos se disputan la presidencia en ese país, Donald Trump por el Partido Republicano y Joe Biden por el Partido Demócrata.
Donald Trump esta optando por su reelección como presidente, el mismo arrastra duras críticas en sus políticas confrontativas, sin máscaras, mostrando claramente la realidad de un sistema que institucionaliza la discriminación racial y ha permitido el ascenso de grupos supremacistas que apoyan las acciones de represión por parte del Estado; así como su conflicto con históricos aliados, caso Europa, OTAN, y asuntos de gran interés como China, Irán, Venezuela y Rusia. Así mismo, su contrincante ha seleccionado como punto de ataque el manejo respecto a la Pandemia que ha cobrado la vida de casi 230mil seres humanos en Estados Unidos y ha infectado a cerca de 9millones. Sin embargo, muchos analistas coinciden que, si no existiera el Covid, fuera impensable que Trump podría perder las presidenciales, por cuanto a lo interno los salarios de los trabajadores más pobres crecieron un 4,7%, la confianza en las pequeñas empresas se recuperó, y ahora el PIB creció un 7,4% en este tercer trimestre a una tasa anualizada a 33,1%, datos que han sido útiles en la campaña de Trump.
Joe Biden, el Candidato Demócrata, quien fue el Vice-presidente durante el Gobierno de Barack Obama, se ha mostrado a lo interno critico a las políticas racistas de Trump, ha prometido mayor ingreso al fisco con la colocación de impuestos a los más ricos, terminar con la brecha salarial entre hombres y mujeres, y una variación en la política contra la pandemia que azota al pueblo estadounidense. En lo internacional, este candidato es un gran creyente de la política de intervención de EEUU, pero a la vez plantea lavar la cara de su país volviendo al acuerdo climático, mejorando las relaciones con Europa y demás miembros de la OTAN, así como revivir el Acuerdo con Irán. Algunos analistas coinciden en que estas promesas no podrán cumplirse en su totalidad.
Encuestas:
Tal como se aclaró, no necesariamente la mayoría de los votos populares será lo que garantizará la presidencia al candidato ganador, sino lo que determinen los 538 representantes electorales. Ahora, distintas encuestas dan como virtual ganador al Candidato Demócrata Joe Biden, veamos:
Universidad del Sur de California ubica a Biden por encima de Trump por 11%. Biden 53% y Trump 42%.
Universidad de Quinnipiac en su encuesta nacional coloca a Biden 10 puntos por encima de Trump. Biden 52% y Trump 42%.
La Empresa de encuestas “FiveThirtyEight” de EEUU: le da a Biden una probabilidad de ganar frente a Trump de 87 sobre 100 puntos.
El Rastreador de encuestas de The Guardian, analizaron los 8 estados que se volcaron a Trump en 2016 (Lowa, Wisconsin, Arizona, Carolina del Norte, Michigan, Ohio, Pensilvania, Florida) y mostraron como Biden lidera por 8,5% las encuestas, Biden 51,6% y Trump 43,1%.
Indudablemente, las elecciones en Estados Unidos centran la atención mundial, con un presidente tan controversial como lo ha sido Donald Trump y otro que promete volver a las políticas que den un mejor rostro internacional a EEUU de “mano de hierro y guante de seda” tal como la aplicada por Barack Obama, que a pesar intervenir en países como Honduras, Ucrania, Libia, Siria, entre otros, y atacar democracias como la de Venezuela, Bolivia, Nicaragua, obtuvo el Premio Nobel de la Paz y se mostraba como defensor de DDHH.
LAILA TAJELDINE
Profesora de la Universidad Bolivariana de Venezuela y analista internacional
Publicado en CEMD.
