El canciller venezolano, Jorge Arreaza reivindicó el papel de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el aporte que pudo dar el mecanismo de integración si estuviese plenamente activo, para afrontar la pandemia.
Al reflexionar en cuanto a la importancia de que los pueblos y gobiernos unan esfuerzos en el combate contra el covid-19; Arreaza lamentó que la ola neoliberal que tomó el poder en algunas naciones se haya dedicado a debilitar al bloque de cooperación.
“Cuán útil hubiese sido la @unasur para enfrentar en conjunto la pandemia. Aquellos gobiernos que se empeñaron en destruirla alegando ficciones ideológicas, tendrán que rendir cuentas ante sus pueblos y ante la historia de la integración suramericana”, expresó el ministro venezolano de Relaciones Exteriores.
Jorge Arreaza también afirmó que “las aguas volverán a su cauce”; para expresar su convicción de que pronto los pueblos latinoamericanos retomen el camino de la democracia y el protagonismo con la elección de gobiernos progresistas.
Unión y cooperación
La Unasur, proyecto impulsado por el comandante Hugo Chávez, nació en mayo de 2008 con la firma del Tratado Constitutivo firmado en Brasilia.
Contó con el respaldo de 12 naciones que se incorporaron al organismo con el objetivo de impulsar proyectos comunes de desarrollo en materia cultural, social, económico y político.
Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela conformaron el mecanismo de integración.
Las presiones del gobierno estadounidense abrieron paso a la instauración de gobiernos de derecha que emprendieron el ataque para debilitar la Unasur.
Los motivos que impulsaron la creación de la Unión de Naciones Suramericanas están aún más vigentes en medio de la pandemia; ya que urge mantener la defensa de los derechos fundamentales en el ámbito socioeconómico y la autodeterminación de los pueblos del Sur.