A juicio del presidente Nicolás Maduro, en Venezuela no existe un sector que se defina como una verdadera oposición, desde el punto de vista político. Detalló que los adversarios de la Revolución siempre se colocan al margen de la Constitución y las leyes.
Estas reflexiones las hizo el mandatario durante el acto de cierre del ciclo virtuoso de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), en el palacio Federal Legislativo, ubicado en Caracas.
“No hemos encontrando al frente, en esa oposición, interlocutores válidos que reconozcan la existencia de nuestra fuerza, nuestro poder; nuestra doctrina y nuestro ser como histórico movimiento bolivariano”, expresó Maduro.
El jefe de Estado refirió que la derecha nacional carece de demócratas reales. Insistió en los esfuerzos de su gobierno para tender puentes en beneficio de la paz, el entendimiento y el diálogo con sectores adversos.
Maduro aseveró que, pese a los atajos que han pretendido tomar estos adversarios, distantes de ser una verdadera oposición; el alto mando político de la Revolución y el alto mando político militar, han tenido muy claro el camino de la constitucionalidad.
En tal sentido, recordó que las llamadas guarimbas, por ejemplo, “no fueron más que un intento insurreccional por derrocar a un gobierno constitucional. Por llevarnos a las puertas de una guerra civil para exigir entonces una intervención militar en Venezuela”.
Agradecimiento a la ANC
Al ratificar que la Asamblea Nacional Constituyente cierra su ciclo virtuoso definitivamente el 31 de diciembre próximo; aseveró que con la activación del Poder Plenipotenciario se impuso la paz, la confianza, la unión cívico-militar y el respeto por las leyes.
“Quiero agradecer también al pueblo de Venezuela por todo el apoyo que, en el transcurso de estos 40 meses que han pasado, le dieron a esta Constituyente; para que condujera nuestro país por el carril de la paz, la estabilidad y la batalla permanente de la Patria”, expresó.
Asimismo, reconoció el desempeño de todos los constituyentes que fueron electos por el pueblo, durante el proceso que correspondió ejercer a la ANC, en un tiempo que definió como “duramente humano, como diría la canción”.