Sigue aumentando el número de contagios de covid-19 en Brasil. Ya son más de 25 mil casos positivos y mil 500 fallecidos, mientras el gobierno de Jair Bolsonaro se resiste a asumir medidas de distanciamiento social de carácter nacional.
La situación de emergencia sanitaria, además de tocar a la población en general, llegó al gabinete ejecutivo: en marzo se contagiaron dos ministros cercanos al Presidente y este martes se hizo público el diagnóstico del gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, principal detractor de la posición de Bolsonaro ante el coronavirus.
Witzel | “Lo que he dicho es que el comportamiento de un jefe de Estado que no se adecúa a las orientaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) puede tener repercusiones internacionales. El Tratado de Roma incluye en su artículo de crímenes contra la humanidad el causar sufrimiento, el causar mal a la integridad física de las personas. Y ya hay una denuncia ante el Tribunal Penal Internacional y eso puede ser una consecuencia de una conducta que no observa las determinaciones de la OMS.”
El controversial gobernador, que ha adoptado fuertes políticas de represión contra los sectores populares, sorprendió a los habitantes de Río de Janeiro al sumarse al grupo de mandatarios locales que adoptó medidas de distanciamiento social y restricciones a las actividades no prioritarias, en contraposición a la disposiciones presidenciales.
Witzel dio a conocer su diagnóstico a través de un video por la red Twitter, en el que aseguró que continuará trabajando dese la residencia oficial, acatando indicaciones médicas.
NOTA OFICIAL pic.twitter.com/NCl7WlPH9v
— Wilson Witzel (@wilsonwitzel) April 14, 2020