Luego de 7 años de servicio diplomático en la República Bolivariana de Venezuela, el nuncio apostólico, Aldo Giordano, deja el país para ir a cumplir funciones ante la Unión Europea. Por tal motivo el jefe de Estado, Nicolás Maduro, lo recibió en un acto protocolar de despedida en en Palacio de Miraflores.
En ese sentido, el mandatario destacó la labor de Giordano en momento de vital importancia para la nación, como el proceso de diálogo y encuentro nacional que convocó el Gobierno nacional en el año 2014, cuando recién había llegado el monseñor a cumplir funciones en el país suramericano.
«El primer recuerdo que tengo del Nuncio Giordano es en este mismo salón, estábamos instalando una Conferencia Nacional de Paz; eran pasos que dábamos en el camino del diálogo como vía efectiva de entendimiento. Era el año 2014, cuando una parte de la oposición se había ido a las calles con el llamado de La Salida: un plan para derrocar al gobierno. Uno de tantos en estos años», recordó Maduro.
En esta ocasión, en sus palabras de despedida, el mandatario dejó un mensaje al Cardenal para que continúe, de forma exitosa, con el cumplimiento de las tareas que ahora debe asumir. Mencionó que Aldo Giordano fue designado como representante del Vaticano ante el continente europeo.
«Le deseo suerte como Nuncio Apostólico de la Unión Europea; pero se que tendrá mucho trabajo como consultor especial sobre los asuntos de Venezuela«, manifestó el jefe de Estado.
Experiencia en el país
Durante la ceremonia de despedida, Maduro resaltó la trayectoria de Aldo Giordano y su profundo conocimiento acerca de la realidad venezolana y sobre la historia que caracteriza su pueblo. «Somos muy rebeldes, usted lo sabe, no nos arrodillamos ante nadie, jamás«, subrayó el Presidente al ilustrar la idiosincrasia de venezolanos y venezolanas.
Además, habló del mensaje de concordia y paz que trajo, de parte del papa Francisco, a su llegada a Venezuela; a partir de los cual se vinculó a todos los sectores sociales, políticos, empresariales, sin distinción.
«Todos encontraron en el Nuncio un hombre que sabe escuchar, respeta la opinión del semejante, la opinión ajena. Ha sido un factor de equilibrio, seriedad diplomática, profesionalismo, altura, respeto a la soberanía de Venezuela, a los venezolanos», añadió.
También destacó el papel del Nuncio Apostólico aliente, en el proceso de beatificación del doctor José Gregorio Hernández, a quien definió como un líder civil, científico y cristiano de Venezuela.
«Yo diría que en el libro que, seguramente usted escribirá, con el permiso del Papa, tendrá que poner un capítulo especial; sobre la felicidad de que usted ha sido el Nuncio para la beatificación de nuestro Santo. Que tenía más de 70 años esperando, en los archivos del Vaticano», puntualizó.
Por su parte, el cardenal Giordano agradeció al gobierno venezolano por el gesto y manifestó su renuncia a la condecoración que se le otorgaría. «El Papa Francisco nos dice que en los países debemos ir a ayudar y no a buscar algo de honor», dijo.
No obstante, el presidente Maduro le homenajeó con la entrega de una obra de arte alusiva a la Virgen del Valle, elaborada por pescadoras y pescadores de Venezuela.