Venezuela seguramente debe figurar como uno de los pocos países, sino el único, que en medio de la pandemia de covid-19 ha recibido un abundante flujo migratorio en reversa. Todos esos connacionales que han tomado la decisión de volver, y lo han hecho por los canales regulares, han conseguido una patria bolivariana que les abre los brazos con amor cristiano.
De acuerdo con los registros oficiales, por los Puestos de Atención Social Integral (PASI), instalados en los estados fronterizos de Zulia, Táchira, Bolívar y Apure, se ha prestado apoyo sanitario y epidemiológico a 70.926 compatriotas. Esta gente regresa a su país huyendo del infierno neoliberal.
Son ciudadanos que han recibido atención médica y psicológica. Se les han practicado pruebas rápidas y de PCR (pueden costar hasta US$ 200 en el exterior y se les hacen 3). Asimismo, se les ha garantizado logística de alojamiento, alimentación y traslado por vía aérea y terrestre. Este despliegue no lo hacen ni siquiera con sus propios ciudadanos en el modelo colombiano, ecuatoriano, brasilero, peruano o chileno.
Atención integral
“A esos venezolanos que han entrado legalmente, le hemos dado todas las garantías, que no tenían en los países donde se encontraban. Todas las garantías sociales, desde su llegada. Atención amorosa, cristiana, humana, solidaria. Le hemos dado al que no tenía nada salud, atención, morada, cama, alimento y amor. Hay que ver lo que es atender a miles sin la ayuda de nadie en el mundo, mientras nos roban los recursos”, expresó el presidente, Nicolás Maduro.
El primer mandatario detalló que las denuncias efectuadas por su gobierno en ningún momento han buscado ofender la dignidad de quienes regresan. En tal sentido, aseveró que la crítica es contra los denominados trocheros. Quienes al ingresar por vías ilegales, evaden el cerco sanitario, poniendo en riesgo la salud propia, la de sus familiares y todo el que les rodea.
Balances oficiales indican que de todas las personas ingresadas legalmente, más 4 mil han dado positivo al coronavirus. En su gran mayoría son casos provenientes de Colombia, donde se sospecha que hay un importante subregistro. Esos pacientes están siendo atendidos en PASI, hospitales centinelas y CDI de forma gratuita.
Estimaciones preliminares
Pero, asimismo, se presume según lo explicado por el Vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, que la cifra de connacionales que ha ingresado por caminos ilegales, puede oscilar entre 30 mil y 70 mil personas. Esto a su vez permite pensar que hay cerca de 4 mil personas contaminadas que andan circulando. Y que de no haberse aplicado las medidas de cuarentena y control ya pudieran haber contagiado a más de 100 mil personas.
“Vamos a salir a defender la verdad de Venezuela. Por el paso de más de 30 mil connacionales por las trochas ilegales, controladas por paramilitares, narcos y el gobierno de Colombia, se han pasado miles de connacionales enfermos, sin control. Hemos llamado a eso los trocheros y los trocheros han contaminado ciudades y estados enteros: Caracas, Miranda, Aragua y Carabobo, entre otros”, expresó Maduro.
Reiteró que lo que se ha solicitado es que los denominados trocheros se pongan a derecho. Anunció que más de 800 de estas personas han sido localizados por información suministrada desde las propias comunidades donde se encuentran. “Se le han hecho los exámenes para seguridad de ellos y de sus familias”.
Disculpas y verdades
El primer mandatario hizo un llamado a los curas católicos que han salido a criticar al gobierno y al padre, Numa Molina. “Deberían ponerse a la orden, estrechar nuestras manos como cristianos y salir a apoyar a estos migrantes, a estos trocheros. Salir a apoyar al pueblo en su salud. Atajo la crítica injusta y defiendo la verdad de Venezuela”, expresó.
No obstante, el primer mandatario ofreció excusas a las personas que se hayan podido sentir aludidas por estos llamados que se han efectuado. “Si alguien se ofendió, por alguna impresión que se dijo solicitamos disculpas. El objetivo no era ofender a nadie sino llamar a la conciencia. Expresar la preocupación y cuidar la salud de los venezolanos y las venezolanas”, concluyó.
