El delantero del club de fútbol portugués de Oporto, Moussa Marega (Franco-Maliense) de 28 años, fue víctima de un ataque racial durante el juego contra el Vitoria de Guimaraes partido de la 21ª jornada del campeonato.
Fueron tres minutos de mucha tensión. Marega, había anotado el 1-2 en el minuto 61, no aguantó más y decidió abandonar el terreno de juego en el campo del Vitoria de Guimaraes, que fuera su equipo en la temporada 2016-2017. Este hecho empañó la victoria de los dragoes por 1-2 ante el Vitória de Guimarães, que lo sitúa a un punto del líder, el Benfica.
«Gracias a los árbitros por no defenderme y además sacarme tarjeta amarilla porque defiendo el color de mi piel. A toda esa gente que viene al estadio a hacer cánticos racistas, ¡Váyanse al diablo!».
Bravo por Marega, jugador del Porto de Portugal que se ha ido del campo tras recibir insultos racistas. Pero queda algo muy importante por hacer: sus compañeros y rivales no tienen que intentar detenerle; tienen que irse con él. pic.twitter.com/uqR4Jt3GIz
— PabloMM (@pablom_m) February 16, 2020
Tras anotar el 1-2, los aficionados la tomaron con él y comenzaron a hacer sonidos de mono y a hacerle movimientos del animal. A los 68 minutos de juego decidió que ya era suficiente y pidió el cambio.
El delantero declaró que entiende la reacción de sus compañeros, que en ese momento no entendían su reacción: «Ellos querían calmarme porque me conocen muy bien. Saben que cuando estoy nervioso soy duro». Para terminar, afirma que «no quería seguir jugando en ese campo» tras los abucheos y gritos racistas.
A pesar de la insistencia tanto de sus compañeros como de los rivales, mientras el técnico Sergio Conceiçao gritaba al público “esto es una vergüenza” y se apresuró entonces en hacer un cambio de urgencia, dando entrada en su lugar a Wilson Manafa (71).
Los árbitros del partido se llevaron la peor parte. El jugador arremetió contra ellos por no defenderle ante esto y mostrarle una tarjeta amarilla.
Muchos aficionados, consciente de la gravedad de la situación, comenzaron a corear el nombre del jugador pero ya el jugador había tomado la decisión de no continuar más en ese estadio.
