Con el otorgamiento del ascenso post mortem a capitán de Milicia al ministro Aristóbulo Istúriz, la Orden Libertadores y Libertadoras de Venezuela en su primera clase, así como la réplica de la espada del Libertador Simón Bolívar, el presidente Nicolás Maduro participó en el homenaje por la partida física del destacado dirigente revolucionario.
Así, el jefe de Estado llegó al Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo, acompañado por la primera combatiente Cilia Flores, para rendir homenaje y entregar el reconocimiento a la profesora Dianora de Istúriz y a Rosarys Istúriz, esposa e hija del profesor, quien era Primer Teniente de la Milicia Bolivariana.
Maduro expresó que se trata de un momento muy triste y reflexionó en torno a la idea de que el ser humano se enfrenta constantemente a la vida y la muerte. “Sabemos, como me dijo ayer un amigo, que la vida es un ratico. Que la muerte y la vida es apenas una rutina y estamos de paso”.
Sin embargo, resaltó también el profundo sentimiento de amor que genera el apego por personas, seres queridos, familiares y compañeros de lucha; razón por la cual “la partida física de nuestro querido profesor Aristóbulo Istúriz es un gran golpe para el pueblo de Venezuela”.
Del mismo modo, en su homenaje hizo un repaso por la trayectoria de Istúriz desde sus luchas sindicales y magisteriales. Luego, como alcalde de Caracas, diputado, constituyente; hasta las responsabilidades ministeriales y como vicepresidente de la República.
Un líder que marcó el rumbo
El mandatario venezolano, Nicolás Maduro, evocó el significado que tuvo la actuación del profesor Aristóbulo Istúriz, en la ruptura del viejo modelo que impuso el bipartidismo; al encarnar la esperanza para el pueblo que venía de la rebelión contra el Fondo Monetario Internacional en 1989.
Comentó que, en aquella época, «El Profe» se convertía en una de las más importantes referencias de los movimientos populares en Caracas. Igualmente, dijo que su primeras victorias electorales, en los últimos tiempos de la IV República, marcaron el paso al nuevo tiempo que vendría.
Además, recordó que Aristóbulo Istúriz fue corredactor de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, con énfasis en los artículos relacionados con la garantía de la educación pública, gratuita, de calidad y de la democracia protagónica.
«Siendo un hombre humilde, Aristóbulo fue un hombre con un gran pensamiento político«, manifestó Maduro en el homenaje.
También, respaldó las palabras del padre Numa Molina, quien aseveró que el profesor era lo más parecido al maestro Simón Rodríguez en estos tiempos del siglo XXI. «No es fácil imaginarse las tareas y las misiones sin él. Sé que su espíritu puede descansar en paz y tranquilidad porque ha cumplido y sobre cumplido su misión aquí, en su Patria Venezuela», añadió el jefe de Estado.
Ser humano ejemplar
Al catalogar a Aristóbulo como un hombre de altura en el pensamiento, recordó que los racistas lo despreciaron en muchas ocasiones; acciones que se evidencian incluso luego de su muerte, con algunos comentarios negativos que evidencia ese tipo de personas en las redes sociales.
«Muchos lo subestimaban por ser del pueblo, humilde, maestro de escuela. Por ser el negro Aristóbulo», comentó el jefe de Estado, quien ratificó que a pesar de esos intentos por ofender al profesor, no podrán hacerlo.
Otra forma de resaltar el valor del ministro Istúriz, fue recordar que en los últimos días, mientras atendía su situación de salud, el profesor manifestaba su preocupación al considerar que por estar enfermo, incurría en faltas ante su responsabilidad en el despacho de Educación.
«Así son los revolucionarios, de verdad, así son los chavistas de verdad. Llenos de amor, de compromiso, de pasión, hasta el último segundo de la vida», fueron las palabras del jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro.